la monotonia en la sexualidad

Publicado el 21 mayo 2020 por Johnny Zuri @johnnyzuri

Es frecuente que la rutina vaya poniendo freno a la vida sexual de las parejas. El cansancio tras las obligaciones del día a día y otras cosas hacen aparecer la monotonia en la sexualidad.

Esto se una a la complejidad de unir o bien de hacer coincidir los horarios laborales, los hijos, etcétera… y hacen que se pierdan las ganas. No obstante, esta es una faceta esencial de la vida en pareja por la que nos debemos preocupar. Por esta razón, los dos miembros deben intentar agregar ciertos cambios para terminar con el imperio de la monotonía. Ciertos accesorios, juegos y demás, que puedes ver en este enlace, sirven para combatir la monotonía en la sexualidad.

Muy frecuentemente, las parejas no introducen novedades en sus relaciones íntimas jamás. Renovarse o bien fallecer de aburrimiento debería ser el leimotiv de las parejas que se hallan en esta situación. Mudar de sitio cuando se hace el amor o bien no aguardar al final de la jornada, cuando se está agotado son buenas ideas. Además de esto, se debe llevar una vida sana para eludir enfermedades, lesiones o bien sencillamente para avejentar mejor.

Una dieta variada, acompañada de ejercicio regular, garantiza una buena salud y unas renovadas energías para la vida en pareja. Gozar de una vida sexual plena es homónimo de bienestar físico y sensible. A veces, no obstante, ciertas personas hayan contrariedades para disfrutar de una sexualidad completa. Muchos son los factores que pueden estar tras esta situación.

Podríamos hablar del estado anímico y los inconvenientes sensibles, las enfermedades, el agobio y la ansiedad, la relación con nuestra pareja… Habitualmente, el primordial inconveniente que nos impide gozar de forma completa es la carencia de deseo sexual. La pérdida del interés por las relaciones íntimas afecta de forma especial a las mujeres, especialmente cuando llega la menopausia.

Sin embargo no se trata de algo exclusivo del género femenino. En este sentido, asimismo los hombres se ven perjudicados por la carencia de deseo sexual. Las razones son variadas, tanto físicas como psicológicas, y van desde la monotonía a la baja autoestima, ansiedad, pudor, falta de iniciativa… Cuando se advierte una falta de deseo sexual, los especialistas aconsejan encarar el inconveniente y no dejarlo pasar.

En nuestro favor tenemos el hecho de que no se trata ni muchísimo menos de una situación irreversible. Existen ademanes y hábitos que nos pueden asistir a alentar el deseo sexual y a regresar a disfrutar de una sexualidad plena.

Nutrir el morbo de la pareja.

La monotonía es uno de los grandes contrincantes del sexo. Si bien en los últimos tiempos han proliferado los medicamentos que prometen multiplicar nuestra libido y deseo sexual, la verdad es que poco hay que hacer si la persona que tenemos al lado no nos atrae. Habitualmente la rutina está tras la pérdida del deseo sexual, con lo que para regresar a nutrir el deseo es preciso reinventarse.

No se trata de un cambio solo en el plano físico y sexual, sino puede ser sencillamente invitar a nuestra pareja a cenar o bien a compartir una experiencia novedosa. En este sentido, cabe apuntar por servirnos de un ejemplo que el deseo sexual femenino, considerablemente más vinculado con el componente sensible, nada tiene que ver con el masculino, considerablemente más centrado en el aspecto físico y carnal.

la monotonia en la sexualidad

Jugar y explorar con la pareja.

El sexo es asimismo juego. Quien encara las relaciones íntimas como un mero trámite cae en un grave fallo y está abocado a aburrir a su pareja y a enfriar su libido y su deseo sexual. Dar relevancia a las caricias y a los preliminares, plantear nuevas situaciones, procurar efectuar nuestras fantasías sexuales, recurrir a juguetes eróticos y en suma cautivar y asombrar a nuestra pareja es esencial para alentar el deseo sexual.

Asimismo lo es la espontaneidad. En este sentido, no siempre y en todo momento aunque sí a veces debemos procurar asombrar a nuestra pareja para dejar atrás la rutina del día tras día y nutrir el deseo sexual..

Debemos hacer ejercicio, bajar de peso, llevar una alimentación sana y equilibrada… estas cosas son parte de los hábitos aconsejables para alentar nuestra vida sexual y nutrir el deseo. Sobre nuestra dieta, cabe indicar que existen comestibles que a pesar de que no serán milagrosos, sí pueden asistirnos a prosperar nuestra sexualidad. Por poner un ejemplo los frutos secos, ricos en arginina, aumentan la capacidad eréctil del hombre, mas asimismo comestibles afrodisiacos como el chocolate o bien la canela, que actúan sobre el hipotálamo, fortalecen el deseo sexual.

Además de esto, no debemos olvidar la necesidad de tener una adecuada higiene personal, esencial para gozar de una vida sexual absolutamente satisfactoria. Admite tu cuerpo y reduce tus demandas. Si no aprendemos a admitir nuestro cuerpo como es, con sus virtudes y sus defectos, nunca lograremos gozar de una vida sexual plena. Las inseguridades son contrincantes del deseo sexual.

Cuanto más seguros nos sintamos con nosotros mismos más lograremos gozar del sexo. Es esencial olvidar los prejuicios y reducir tus demandas cara a tu pareja. Debemos olvidarnos de lo que hayamos podido ver en películas porno. El sexo real no es lo que se ve en el cine para adultos.

Comunícate con tu pareja.

Este consejo seguramente sea el más esencial de todos. La comunicación con nuestra pareja es para acrecentar el deseo sexual. Y lo es para todos y cada uno de los aspectos de nuestra relación. Como resulta lógico asimismo para el plano sexual. Por vergüenza, en muchas ocasiones nos cortamos en el momento de contar a nuestro compañero o bien compañera nuestras fantasías sexuales.

A veces, la carencia de deseo sexual está asociada a la falta de placer que experimentan ciertas personas. Y en ocasiones, esto es debido exactamente a que no se ha transmitido a la pareja qué verdaderamente nos agrada. Es esencial charlar de estas cuestiones con la pareja para lograr gozar al cien por ciento de nuestras relaciones íntimas