Leonardo da Vinci no sólo es, como se asocia con frecuencia, el pintor de la Mona Lisa y la Última Cena, sino también un fabricante de automatismos: verdaderos robots que sin motor ni electricidad eran capaces de caminar por si sólos.
Tales movimientos sorprendian a los poderosos de la época y se convertían en caprichos reales. Como el león mecánico, que Leonardo da Vinci había creado para Francisco I Rey de Francia en 1515 para celebrar una nueva alianza entre la ciudad italiana y Francia.
En Roma, más precisamente en el pleno centro de la ciudad eterna, en el Palazzo della Cancelleria en el Campo de' Fiori está la muestra permanente dedicada al genio universal de Leonardo.
Cerca del cierre (culmina el 30 de abril próximo) abrió sus puertas al público en general un lejano 30 de abril del 2009.
Once años de un suceso muy pocas veces visto. Más de 200 máquinas proyectadas, 65 modelos reconstruídos, 9 hologramas animados.
La Muestra Leonardo Da Vinci ofrece a cada visitante una experiencia única donde la percepción sensorial y el conocimiento "leonardístico" se funden en un pasado de extraordinaria actualidad.
En el año 2019 con motivo de conmemorarse los 500 años de la muerte de Leonardo, numerosas muestras fueron preparadas en todo el territorio italiano y también a nivel internacional.
Un trabajo imponente y singular.
Un trabajo imponente y singular seguido con extraordinaria precisión para recrear con la mayor fidelidad posible las máquinas de Leonardo.
En algunas casos como la ballesta gigante debido a las dimensiones del invento se han reproducido más pequeños, respetando de cualquier manera el diseño original.
León mecanico.
El león mecánico original de Leonardo da Vinci se perdió hace tiempo, pero quedaron dibujos detallados de los mecanismos que permiten ver cómo el inventor logró hacer funcionar al animal.
Utilizando esos dibujos y las descripciones escritas, el maestro fabricante de autómatas Renato Boaretto recreó el león mecánico para el Castillo de Clos-Lucé en el año 2009.
Sierra hidráulica.
Leonardo comenzó a trabajar en el proyecto de "un sistema de transporte automático de corte para la madera",-como él mismo lo llamó- al darse cuenta de lo difícil que era para los carpinteros de esa época hacer los cortes de madera a medida con velocidad y precisión.
Draga marítima.
Leonardo diseñó esta máquina, que resultó ser completamente funcional en el futuro, para que se utilizara en la limpieza de los ríos o diques secos para remover de las piedras y la arena acumulada en el fondo marino que obstaculiza el flujo normal de agua.
La máquina también se utilizó para crear la nivelación y estabilización de los cursos de agua.
Ballesta gigante.
La ballesta de Leonardo o ballesta gigante era un arma diseñado por Leonardo da Vinci, cuyos dibujos están en el Códice Atlántico. Nunca se dio cuenta el genio universal de todas las éplicas que se construirían en los tiempos modernos en los museos dedicados al genio.
La idea original de Leonardo, como se describe en los dibujos del Códice Atlántico (1488-1489), era la construcción de una ballesta gigante con el fin de aumentar el alcance del dardo, creando pánico y miedo entre los enemigos.
Los brazos de la ballesta, tenían una apertura total de 24 metros, y tuvieron que ser realizado en secciones laminares, para aumentar la flexibilidad y potencia. Seis ruedas asegurarían el movimiento. El cable de tracción se podía retrasar por un sistema mecánico y fue hecha en dos modelos que funcionaban por percusión o por palanca.
El automóvil.
Leonardo tiene poco más de 26 años cuando decide de pensar en un medio de transporte o "las cosas se mueven", un dispositivo mecánico que sería capaz de resolver muchas cuestiones relacionadas con el movimiento.
Para ello utiliza un principio de estudio relacionado con el elástico y no, por supuesto, al motor que no existía, mientras que la misma herramienta elástica sería capaz de almacenar y liberar energía acumulada bajo la forma de torsión.
Comienzó a describir su proyecto en el Códice Atlántico donde diseñó una proyecto de máquina bastante complejo, donde el "motor" se componía de una serie de engranajes dentados, llamada ruedas grandes, que se conviertían así en la fuerza impulsora. Estas ruedas estában conectadas a un par de muelles que tenían el propósito de absorber la energía producida.
Helicóptero.
Hacia el año 1490, el helicóptero de Leonardo da Vinci al que llamó "Tornillo Aéreo", fue representado en uno de sus cuadernos.
El helicóptero, cuya estructura mide unos 15 metros de diámetro, consta de dos partes principales: un rotor helicoidal y un disco fijo debajo del rotor.
Leonardo no tuvo en cuenta, que en el momento de levantarse del suelo, el disco fijo de la base comenzaría a girar en sentido contrario al del rotor. Su helicóptero hubiese necesitado un rotor de cola, como el que llevan los helicópteros modernos, para evitar la rotación de la base.
Planeador.
Uno de los inventos más famosos de da Vinci, la máquina voladora (también conocida como el "ornitóptero") muestra idealmente sus poderes de observación e imaginación, así como su entusiasmo por el potencial de vuelo.
El diseño de esta invención está claramente inspirado en el vuelo de los animales alados, el cual da Vinci esperaba replicar. De hecho, en sus notas, menciona los murciélagos, cometas y aves como fuentes de inspiración.
El Códice Atlántico.
El Códice Atlántico es la colección más grande de dibujos y escritos de Leonardo da Vinci. Se conserva en la Biblioteca Ambrosiana dedi Milano.
Esta obra contiene los dibujos más espectaculares realizados por Leonardo sobre innovadores proyectos tecnológicos, armas y fortificaciones, aparatos hidráulicos, máquinas voladoras y embarcaciones.
En el año 2009 fue restaurado desencuadernado y restaurado por expertos para ayudar a conservar la mayor colección de dibujos y escritos del maestro italiano y permitir la exposición de algunas de sus páginas.