En una cuna católica
Simone Ernestine Lucie Marie Bertrand de Beauvoir nació el 9 de enero de 1908 en París en el seno de una familia burguesa con una moral cristiana muy estricta. Simone y su hermana pequeña Poupette, con la que mantuvo siempre una estrecha relación, fueron educadas en colegios católicos siempre bajo la rígida disciplina de una madre profundamente religiosa. Ya siendo una adolescente, Simone se rebelaría contra la fe familiar declarándose atea y viendo en la religión una forma de subyugar al ser humano. De su padre, un abogado que dejó atrás su sueño de ser actor de teatro, heredó el amor por la literatura. En los brazos de un filósofo Simone se fue a vivir con su abuela y empezó sus estudios de filosofía en la universidad de la Sorbona. Con una tesis sobre Leibniz Simone se graduó en 1929. Aquel mismo año, la joven graduada conoció a Jean Paul Sartre con el que iniciaría una relación totalmente distinta a los cánones establecidos. Jean Paul y Simone, quien nunca se planteó la posibilidad de contraer matrimonio, establecieron una relación de pareja basada en el respeto y la libertad de cada uno como individuo. Una relación que duró hasta la muerte del filósofo en 1980.