La mujer zurda

Por Epifania
La soledad puede ser el mayor castigo o el mejor de los palacios si quien se refugia en ella la busca de manera voluntaria. La protagonista de la novela de Hanke toma una decisión férrea sobre su vida: dejar a su marido y empezar una vida dedicada a ella misma en compañía de su hijo.
La novela nos hace participes de cada una de las etapas en la ruptura de una relación. Incredulidad, rabia, confusión son algunos de los sentimientos que dejan entrever los personajes en sus diálogos y en los actos que van aconteciendo en su día a día.En estas mismas escenas cotidianas, y sin recurrir a frases solemnes, el autor hace un retrato de la soledad como si se tratase de escenas de una película. Y es que, no debemos olvidar que Peter Hanke también ha sido director de cine y ha colaborado como guionista en películas como El cielo sobre Berlín. Los diálogos con otros personajes son vacíos y no muestran una verdadera conexión parar recalcar la necesidad de la mujer de estar con ella misma.
El autor pretende trasmitir con su escritura sencilla como la elección de una persona sobre su propia vida puede ser enriquecedora para lograr sus propias metas. De hecho, sólo cuando está sola la mujer empieza a traducir y progresa en su trabajo. Pero por otro lado, Hanke refleja el lado oscuro de la soledad: la necesidad de compartir, la falta de afecto y el miedo a estar solo y desprotegido. Es por esto, que se trata de una novela sobre los sentimientos de las personas que no se centra en contar una historia concreta.
Por otra parte, hay que destacar que este libro fue bastante revolucionario en su época (1976) puesto que el divorcio era un tema tabú. Obras como esta son las que han abierto el camino a las mujeres, pues apoya la libre elección del destino dejando de lado las concepciones sociales.

En 2017 fue nombrado Doctor Honoris Causa por la Universidad de Alcalá de Henares