Patrick Rothfuss es de mis escritores favoritos. El nombre del viento y El temor de un hombre sabio son dos libros que recomiendo a todo el mundo y que están entre mis favoritos (sólo me falta ponerlos en un altar). Tenía este libro pendiente en mi estantería desde hace siglos, incapaz de decidirme a leerlo. Finalmente, creo que fue la combinación de mi madre (¡coloca los libros en la estantería yaaaa!) y la reseña de Lectura de buhardilla quienes me decidieron.
(*suspiro*)
No ha sido lo que esperaba. He estado tentada de ponerme a leer las reseñas que pululan por Internet, pero según mi código de honor no lo hago hasta terminar la reseña (creo que ese es el motivo principal por el que estoy escribiendo esto), para evitar así que mi reseña esté influenciada por las opiniones de otros. Así que nada, aquí os la dejo.
Nº de páginas: 160 págs.
Lengua: CASTELLANO
Encuadernación: Tapa dura
ISBN: 9788401343575
Año edición: 2014
Plaza de edición: ES
Sinopsis:
La Universidad, el bastión del conocimiento, atrae a las mentes más brillantes, que acuden para aprender los misterios de ciencias como la artificería y la alquimia. Sin embargo, bajo esos edificios y sus concurridas aulas hay un laberinto de túneles antiguos, de salas y habitaciones abandonadas, de pasillos serpenteantes y semiderruidos…
La Subrealidad. Allí vive Auri.
Tiempo atrás fue alumna de la Universidad. Ahora cuida de este otro mundo, para ella acogedor, maravilloso, en el que podría pasarse la eternidad mirando. Ha aprendido que hay misterios que no conviene remover; es mejor dejarlos en paz y a salvo. Ya no se deja engañar por la lógica en la que tanto confían en lo alto: Auri sabe reconocer los sutiles peligros y los nombres olvidados que se ocultan bajo la superficie de las cosas.
Opinión:
A ver, este libro no tiene casi nada que ver con la trilogía y al mismo tiempo lo tiene que ver todo. No, así no quiero empezar la reseña. Empiezo otra vez.
En general este libro es un resumen de cómo es la semana de Auri. Nos adentra en las entrañas de la Subrealidad, conocemos sus quehaceres diarios, profundizamos en el personaje en su forma de pensar y actuar, etc. En ese aspecto, un diez.
Una última cosa positiva es la personificación de los objetos. Aunque a parte de Auri no haya más personajes, todos los objetos que la rodean, las salas, los muebles, todo, se personifica, tiene sentimientos y emociones e incluso, opiniones propias, a pesar de que ninguno de ellos habla realmente. Me ha sorprendido esa profundidad, ¡nunca hubiera dicho que se podía hablar tanto sobre cazuelas!
Y ahora es cuando llegan los peros.
No conozco mucho mejor a Auri. Sigue siendo tan misteriosa como antes y tengo más curiosidad aún sobre de dónde sale y cuál es su pasado. En ese aspecto he quedado insatisfecha, deseosa de más.
Por otra parte, esta es una novela diferente porque le faltan muchas cosas. No hay ni un solo diálogo. Sólo hay un personaje. Todo el libro son descripciones. No hay acción. No sucede absolutamente nada. Y aún así, tiene un algo. Puede que sin haber leído nada del autor le hubiera dado una puntuación bajísima, pero precisamente porque lo he leído, sé que es mejor no decir nada.
Estoy releyendo esta reseña y me parece que no os digo nada útil. ¡Es que es tan difícil! No sé si el libro me ha gustado o no. ¡No lo sé! No es un libro apasionante ni adictivo, pero definitivamente, tiene un algo que no se puede definir.
Mirad que soy de rara que creo que lo que más me ha gustado ha sido el prólogo. Sí, sí, de verdad: es apasionante. ¡Lo que me he reído! Además, permite conocer el proceso de creación del libro ye entenderlo un poco mejor.
En conclusión, un libro que profundiza más sobre la Subrealidad, pero no sobre el pasado de Auri. Es un libro bien escrito, pero diferente porque le faltan muchas cosas. Y en cuanto a si me ha gustado o no...creo que me acojo a una frase del autor "Si sois de los que la encuentran desconcertante o decepcionante, os pido disculpas. La verdad es que, seguramente, no era para vosotros."
PUNTUACIÓN...3/5!