La nevera “StopTime”.

Publicado el 30 marzo 2011 por Bypils @bypils

Mi pisito, pequeño pero para mí solita… ¡Estaba tan contenta! Mi primer trabajo fijo y estable, los proyectos bullendo en mi cabeza y… aquel apartamento, casi en miniatura, pero mío…Sólo mío… ¡Eran tan, tan joven!…

Lo recuerdo cómo si fuera ayer. O como si hubiese ocurrido hace unas semanas…

Esas visitas a IKEA , con un plano hecho a mano, y todas las posibilidades del mundo.

Todas esas posibilidades, convertidas en muebles que monté con mi sudor ( y mi sangre, literalmente), recreando mi mini mundo en mi mini piso.

Mi mini mundo en mi mini piso absolutamente perfecto: un buen sofá, una buena cama , una buena tele ( ¡Gracias, papá!) y una buena nevera…

Tener una “buena nevera” ( como la que zumbaba en casa desde que yo tenía uso de razón) era una herencia psicológica de mi querida madre. Se obsesionaba en recomendar la nuestra a cualquier persona que le preguntara y, también, si no se lo preguntaban. La veo, como si estuviera aquí, mostrando su cocina primorosa y, al llegar a la nevera, decir “Esta nevera StopTime es la mejor nevera del mundo. Más de veinte años funcionando y no me ha dado ningún problema. Si alguna vez te cambias de nevera, cómprate una StopTime” .  Así que cuando llegó el momento de comprar una buena nevera , decidí honrar a mi madre y comprar una StopTime en eBay.

La fábrica había cerrado hacía años, y las únicas neveras StopTime que había en el mercado, eran de segunda mano. Mi madre ya compró la suya en una tienda de productos con tara: “ El StopTime no funciona”, rezaba la cartulina con el gran círculo rojo que marcaba el precio y la tara. Pero era tan barata y estaba tan nueva, que mi madre se la llevó a casa y nunca encontró el defecto. “La nevera va perfectamente. Se habrán equivocado… No sé que será el “Stop-Time- ese” pero, a mí, la nevera me va de fábula”

Mi presupuesto era más bien escaso así que compré una StopTime de nivel 1 ( era la más barata), con sus dos cajones para fruta y verdura, un cajón para la carne y el pescado y todos los estantes de cristal. La estaba limpiando cuando encontré el manual de instrucciones, justamente en la zona de los huevos. Recuerdo que me sorprendió que el anterior propietario lo hubiese conservado pero no le hice mucho caso. Lo metí en el cajón en el que estaban todos los manuales y garantías de todos los aparatos que tenía en mi mini piso y me olvidé de él.

Creí que abriría con poca frecuencia el cajón de los manuales  pero…la televisión me hizo un puffff! extraño y se puso de color azul. Un sábado por la noche… Cómo tenía claro que hasta el lunes no podría solucionar la avería, me leí el manual con la esperanza de encontrar una solución que, evidentemente, no encontré. Aburrida ( y sin tele), me puse a ordenar los manuales y garantías ( que había sacado con urgencia y mal) y me encontré con el de la nevera “StopTime”. Al ponerlo en su lugar, una pequeña hoja plateada, se deslizó de su interior y cayó suavemente en el centro de la mesa. Era una cuartilla de un delicado color plata que contenía un texto caligrafiado. El hecho de ver una nota manuscrita me sonó fuera de lugar en un manual técnico y la leí con curiosidad, sabiendo que sería una nota del antiguo propietario que se había traspapelado…

Pero no era una carta de amor, ni una felicitación de navidad, ni un poema… Era algo así como esto:

StopTime Nivel 1

No permite traslación.

Indicar hora y lugar.

Duración máxima de Nivel 1: Cinco horas.

Yo creo que fue lo del aburrimiento, que era sábado, no tenía plan y estaba sin tele. También pudo intervenir en lo que ocurrió, que hacía poco que me había leído “El Código Da Vinci”. No lo sé, pero, de repente, en vez de leer stoptime cómo mi madre lo había pronunciado toda la vida ( no “taim” , si “time” ), me di cuenta que la nevera se llamaba “ParaTiempo”.  Y algo hizo click en mi cerebro y pensé : Parar, detener…congelar.  Hora y lugar. ¿Y si…?. Duración máxima…

Abrí mi portátil y tecleé el texto de la nota en Google…Tras muchas horas de búsqueda , encontré un foro de nombre “ TimeStoppers”  que me proporcionó la información definitiva :  ¡Mi nevera congelaba el tiempo!

Me reí muchísimo leyendo las historias de ese grupo de fanáticos de la marca StopTime que hasta tenían un grupo en facebook . Era gente con una gran inventiva , que explicaban historias graciosísimas sobre las cosas qué habían hecho al congelar el tiempo en su nevera “StopTime”. Recuerdo que pensé que a mi madre le hubiese encantado…

Al ir a preparar la cena, abrí la nevera y la miré con atención. Nivel 1. Según lo que había leído , era el nivel más básico de congelación de tiempo. No permitía la traslación, o sea, debías moverte tú mismo al lugar dónde se iba a congelar el tiempo. Si tenías una nevera de Nivel 5, no sólo lo congelaba allí dónde tu eligieras sino que, además, te transportaba al escenario en el que ocurría el parón de forma instantánea. La mayoría de los que escribían en el foro, explicaban que lo único que se debía hacer era escribir, fecha, hora y lugar en un papelito y dejarlo en la nevera en el compartimento secreto “StopTime”. Al cerrarlo, se activaba la función : congelaría el tiempo en ese momento y lugar y , en mi caso, con nevera Nivel 1, la congelación duraría cinco horas como máximo. Lo mejor de todo era que el Stopper ( o esa el propietario de la nevera, o sea yo? ), no se paraba y podía campar a sus anchas por la “zona de congelamiento”… Era genial cómo idea para una novela de ficción…

Mientras cenaba, mi mente no dejaba de pensar en esa tontería del StopTime y el grupo de pirados que formaban aquel extraño foro . Pero sobre todo, lo que me acosaba era : ¿Qué situación, momento, lugar, elegiría yo para que se congelara el tiempo?…y curiosear, claro.

Me dejé llevar : si se podía hacer eso ¿Por qué no hacerlo a lo grande?.  Una cuestión era el tiempo : debía ser en el futuro porque no había forma alguna de viajar hacia atrás . Y la otra era que para poder realizar una prueba fiable, el lugar debería ser asequible para mí.

Pensé en el día que se avecinaba : domingo. Comida en casa de mis padres y visita al Camp Nou … ¿No fue eso el domingo pasado? , ¿O ya han pasado años?…No sé ..¡Era tan joven!… pero lo recuerdo como si fuera ayer. Lo del Camp Nou era una de las cosas que había reivindicado en la familia durante toda mi niñez y adolescencia. Mi padre, nada más nacer mi hermano, lo hizo socio del F.C. Barcelona y lo llevó a todos los partidos. Mi condición de mujer, que a mi padre le pesaba mucho, me dejó sin poder asistir , nunca jamás, al campo . Y no es que yo fuera muy de fútbol pero , sólo por el hecho de no poder hacerlo, el hacerlo se había convertido en uno de mis objetivos vitales : iba a ir a ver un Barça-Madrid e, inexplicablemente, había convencido a mi hermano para que me dejara acompañarlo … ¿Y si congelaba el partido una hora? ¿Y si me paseaba por el campo y me acercaba a Messi, a Piqué…?.

Valoré que si ponía mi papelito en el StopTime y no ocurría nada, nadie se iba a enterar y …si ocurría…

Y por allí me paseé, por esa hierba mullida que se había quedado en suspensión en el aire, tras un fuerte patadón de Sergio Ramos. Vi que Iker era mucho más guapo en las distancias cortas y  me recreé en el banquillo y observé a Guardiola y a Mourinho ( ¡Qué tensión en la frente!). En los vestuarios, no pude evitar curiosear en las bolsas y confieso que rebusqué en la mochila de Piqué para ver si encontraba algo de Shakira.  La hora pasó volando y cuando acabó, me encontraba sentada al lado de mi hermano (que se había quedado con medio grito en la boca) que siguió el discurrir temporal cómo si no hubiese pasado nada.

El descubrimiento extraordinario del funcionamiento del StopTime, me había dejado conmocionada y muy cansada. Mi hermano creyó que era la emoción ( él es muy culé) de ver el partido en el Camp Nou pero lo que me pasaba era que, a partir del momento en que me dí cuenta qué podía hacer con la nevera, no dejé de pensar en …todo lo que podía hacer con la nevera.

Me inscribí en el foro y rescaté las experiencias de otros. No hice caso al mensaje en rojo que ponía ADVERTENCIA: PARA LOS USUARIOS DE STOPTIME y me dediqué a congelar el tiempo a diestro y siniestro.

Me he convertido en una ladrona : he parado el tiempo en Bancos y Cajas, en Armani, en Apple , en…cualquier sitio del que quisiera algo.  Mi mini piso está a rebosar de cosas preciosas. He visitado los Museos más fascinantes del mundo , sin nadie que me molestara . Me he plantado a centímetros de la cara de … ( no lo puedo decir) y le he dado un beso. He fisgoneado en mi  expediente de Recursos Humanos en el trabajo, he viajado sin hacer ni una cola para facturar el equipaje o sacar la tarjeta de embarque, he robado y copiado las preguntas de mi examen para las oposiciones, he espiado en empresas de la competencia, he leído el último libro (aún no publicado) de A.Rowling,… He hecho esas cosas y muchas más pero… ayer leí el mensaje de ADVERTENCIA del foro  y comprendí qué es lo que me está pasando.

El cansancio,  las canas, esas arrugas que no deberían estar ahí a los veinticinco años… La mirada extraña de los que me conocen que no me reconocen en esta mujer …mayor.

Y es que el tiempo se congela pero los Stoppers, no sólo seguimos en el eje temporal si no que, además, vamos acelerados. Mi tiempo congelado tiene una proporción entre tiempo consumido y horas.  Una hora en acción cuando todo se para, equivale a unos seis meses de tiempo real. Humano.

Si hago la cuenta de la vieja -¡Qué ironía!-, me sale que me he sumado unos veinte años de tiempo normal. Tengo veinticinco pero soy una stopper … Y no sé si podré parar.

Lo voy a intentar en serio. Incluso me he inscrito en un grupo de terapia, de gente que lo está dejando. Por lo menos, tengo una esperanza: los de nivel 5 están mucho peor que yo y alguno ha conseguido dejar de congelar.

Me han hablado de este libro en el que se están describiendo objetos “sencillos” y he pensado que podía aportar mi nevera. Mi terapeuta me ha indicado que debo hacer pública mi experiencia para poder avanzar en mi recuperación.

Y , aquí estoy, publicándola.

Soy Stopper y hace una semana que no congelo.

N.B : De “Objetos sencillos que tienes en casa” . SoopBook