Ser vegetariano no es precisamente un sinónimo de delgadez o salud, pero si que es un buen camino si se hace correctamente… Tampoco implica comer solamente verduras o frutas. Por otra parte, si os atiborráis de arroz, pan, legumbres o pasta sin control, no solamente no perderéis peso, sino que caeréis en un desequilibrio nutricional. Pero si os atiborráis de patatas fritas y Coca-Cola, también caeréis en desequilibro, a pesar de seguir sin comer carne… Lo fundamental es obtener un conocimiento de porqué hacer los cambios (si es lo que se quiere hacer) y cómo hacerlos.
Este libro es una completa guía (y además de verdad) para todas aquellas personas, vegetarianas y no vegetarianas (sí, no solamente de carne vive el hombre) que quieren cuidarse y disfrutar con una alimentación sana, completa y respetuosa con el mundo animal, a la vez que ampliar conocimientos sobre los ingredientes y maneras diferentes de cocinar platos sin carne ni pescado, sabrosos, nutritivos, equilibrados y fáciles de preparar.
Además de encontrar más de 120 recetas vegetarianas de todo tipo: desde aperitivos, a platos principales, postres y bebidas, en los primeros capítulos, la autora hace un repaso a los principales ingredientes y técnicas de cocina vegetariana, nos explica como se puede hacer la transición hacia el vegetarianismo y nos ofrece interesantes detalles y curiosidades sobre algunos alimentos como son los lácteos (leche, mantequilla, quesos), huevos, endulzantes (naturales y sintéticos), algas, semillas y otros productos que alguna vez pueden crear algún tipo de confusión.
La cocina vegetariana no tiene porque ser aburrida, sosa e insípida, ni por el contrario tampoco tiene porque ser muy complicada, ni reiterativa. Solamente hay que aprender a combinar los diferentes elementos para mejorar el sabor de los platos. No hay límites si se pone un poco de imaginación y mucho amor!!!!
Besos desde mi blog!!!