La ocra

Por Celiaganzano @Cocinista

Se me ocurren pocos ingredientes culinarios que siendo de consumo muy frecuente en amplias zonas del mundo sean prácticamente desconocidos en Europa. Uno de ellos sin duda es la okra (ocra como la reconoce la RAE o mejor, quingombó, nombre original africano y también reconocido por la Real Academia). Se trata de un vegetal de forma alargada de unos 10 centímetros de largo con una característica forma cónica. Es el fruto de un planta de la misma familia que los hibiscos originaria de zonas centrales cálidas de África. Debe recogerse antes de llegar a su madurez para que esté tierna y una vez lavada y eliminada la parte del tallo, se come todo, incluidas las pepitas que lleva en su interior.

La ocra tiene un sabor suave que la convierte en un ingrediente fácil de combinar con otros alimentos. Se puede comer cruda en ensalada, se puede cocer y guisar y se puede freír. Además de en África, es parte de la gastronomía de amplias zonas de Asia y también la encontraremos en zonas receptoras de los antiguos esclavos negros. En Estados Unidos, por ejemplo, se encuentra normalmente en los supermercados y es un ingrediente imprescindible de la famosa cocina “Southern”, es decir, del sur del país, de maravillosa y deliciosa influencia africana.

Como ya he dicho, es difícil encontrar este vegetal fresco en tiendas españolas pero la buena noticia es que es posible encontrarlo en lataSi no lo has probado nunca y quieres saber cómo es y a qué sabe un alimento consumido a diario por millones de personas en el mundo, añádelo un día a una de tus recetas. Puedes empezar añadiéndolo a un guiso de pollo o carne, sabiendo que no debe cocer demasiado (5 minutos son suficientes) o también puedes saltearlo con otros vegetales y hacer un revuelto con huevos. Como ya hemos dicho, es un ingrediente versátil que casa bien con casi todo, incluidas unas gambas.