Para mi fue todo un descubrimiento el edamame frito con salsa de pimientas. Me encantó esta especie de vainas que se convierten en un vicio. También probé el pulpo frito sobre risoto de remolacha, lima y cilantro, las pakoras con vinagreta de café, los dados de solomillo de cerdo con salsa micuit, la tosta de foie fresco con teriyaki de oporto, anguila ahumada y wasabi. Pedimos un surtido de postre y destacar la tarta de aguacate con jengibre y curry. Expectacular !!!!
Un sitio al que volveré seguro, el trato fue muy bueno y al que recomiendo que vayan.