1. Tonos whisky para una prenda camel.
2. Rosa luminoso.
Íbamos a salir por la mañana y me pedía el cuerpo un look luminoso. De esta paleta siempre se destacan sus tonos más oscuros porque son preciosos, pero que no se nos pasen los más claros desapercibidos porque dan mucho juego también. En este caso, llego la segunda sombra de la fila izquierda sobre una base en crema rosada y la he oscurecido levemente en la cuenca con la sombra marrón rojiza (la cuarta de la misma columna) para dar profundidad. Delinée a ras de pestañas superiores y dejé limpias las inferiores para una mirada más despejada y juvenil.
En los labios llevo mi querido Lovelorn de MAC.
Además, podéis ver en las fotos la base de maquillaje que llevo en los cuatro looks: es la Satiné Fluido de Maybelline y más adelante os haré review porque me gusta mucho. El corrector, es el de Kiko que repuse hace poco y la máscara, la Lashsensational, también de Maybelline y que, como sabéis, me ha sorprendido mucho y para bien. Os dejo la combinación de ropa con que conjunté el maquillaje. 3. El famoso color "ala de mosca".
Siempre que uso la que es quizá la sombra más famosa de la paleta, me acuerdo de mi amiga Adaldrida, que dio de llamar, a esta sombra, "color ala de mosca" con mucho acierto. Es la última de la fila derecha, ésa que comparan con "míticas" como la Label Whore o la Club de MAC y que ya tiene "primas" parecidas en versiones low cost, como la C'on Chamaleon de Catrice.
El caso es que la usé sobre mi sombra en crema burdeos de las Color Tattoo de Maybeline para un ahumado como el que ven en la foto. Y la misma sombra, pero sobre la base negra del lápiz, da lugar al contraste a ras de pestañas inferiores. ¡Qué divertido es jugar a cambiar bases y obtener resultados tan diferentes! Completé el look con mi trío favorito de esta temporada: iluminador en pómulos y mezcla de rubores en las mejillas con el Blush Scuplt de L'oreal. En los labios, un gloss rosado de Deborah.
4. Domingos "de drama"
Normalmente, asocio los domingos con looks más relajados y suaves pero ese día el cuerpo me pedía arreglarme y yo soy mucho de escuchar a mi cuerpo cuando se trata de maquillaje (jajaja). Otra muestra de cómo cambia el resultado cambiando la forma de aplicar: de nuevo la sombra en crema de Maybelline, pero en esta ocasión con la sombra marrón rojiza de la columna de la izquierda da lugar a un ahumado muy marcado, poque además lleva bastante lápiz negro a ras de pestañas inferiores y en ambas líneas de agua. En los labios, el mismo gloss de antes pero con perfilador marrón de Guylond - que es en realidad de ojos pero no me gusta para esa zona por ser algo rojizo - ha dado lugar a un nude discreto y favorecedor. ...y hasta aquí los cuatro looks. ¿Con cuál os quedáis? ¡¡BESOS!!