La pantomima tragicómica del independentismo catalán

Publicado el 11 noviembre 2014 por Franky
El proceso catalán de independencia es un esperpento que sería ridículo y cómico si no fuera peligroso y gravemente dañino para España, su economía y su convivencia. Todo es una mezcla de delito, usura, desprecio a las leyes, arrogancia, chantaje y cuadro tragicómico que cualquier día hasta puede derivar en violencia. Los responsables de ese esperpento deberían ser sometidos al imperio de la ley y los que gobiernan deberían actuar con eficacia, ya que los ciudadanos tienen derecho a que ellos, ademas de disfrutar de privilegios y poder, resuelvan los problemas. No veo grandeza ni decencia en el proceso soberanista catalán sino deseos de impunidad, usura y expolio por parte de su clase dirigente. Tampoco hay grandeza en el gobierno de España, incapaz de hacer cumplir la ley y siempre dispuesto a negociar, no tanto para solucionar el problema como para seguir en el poder y ganar votos. Catalanes y españoels son víctimas por igual de políticos sin altura ni decencia. Si quisieran construir en Cataluña una verdadera democracia, entenderíamos la independencia y la apoyaríamos, pero ¿alguien se cree que los Pujol, los Mas y esa tribu multimillonaria, cobradora de comisiones, puede desear una democracia, que por definición es un sistema que controla a los delincuentes y sátrapas mediante una red de leyes, contrapesos, controles y cautelas? Todos somos víctimas de gobernantes inicuos. Ese es el drama. Un amigo me envía un texto donde el proceso catalán es trasladado a una comunidad de vecinos. Leerlo es instructivo y ayuda a entender lo que está pasando en la Cataluña de Pujol y de Mas, donde los poderosos parece que quieren la independencia para tener mas poder, impunidad, dinero y manos libres para la corrupción. --- El lunes voy a hablar con la agencia de la comunidad de vecinos, para informarles de que pienso pintar la fachada de mi piso de verde.

Ya me imagino su reacción, se negarán a negociar, me dirán que tiene que estar toda la fachada del mismo color, que para pintar el edificio lo tendrían que votar todos los vecinos de la comunidad...

Me voy a negar en rotundo, les voy a decir que el 15 de enero, digan lo que digan tanto la comunidad, como el ayuntamiento, yo mi fachada la pinto de verde, que ejerzo mi derecho a decidir y que además se va a hacer una votación, pero nada de votar todos los vecinos, ellos no viven en mi casa, por lo que se votará únicamente en mi casa.

Ya lo tengo todo maquinado, no voy a poner un mínimo de participación, también podrán votar los menores de edad (tengo un niño de 2 años y una niña de 5 que dirán que si, porque les he dicho que el verde es más bonito, que mola más y que serán la envidia del barrio). Mi mujer dice que ella pasa de votar, que no está para tonterías y que hay que hacer lo que decida la comunidad. Será facha la tía esta ¡FASCISTA!.

Además podrá votar mi hermano, ya que trabaja aquí y puede subir a mi casa cuando quiera. Como le he prometido un aumento de sueldo (que no pienso cumplir) votará que si.

También podrán votar unos colegas míos que vienen a mi casa de vez en cuando, a los que les he prometido cervezas de marca y jamón ibérico si apoyan mi decisión. Luego les pondré cerveza del DIA y patatas fritas como siempre, en el mejor de los casos.

A la comunidad les diré que o me dejan hacerlo o dejaré de pagar la comunidad.

Por supuesto, los votos los contaré yo mismo, con lo que entre mi voto, el de mis dos niños, mi hermano y mis 5 amigos suman 150 votos a favor y una abstención de la facha de mi mujer, que precisamente es la única nacida aquí.