Continuos dardos son lanzados con esos fines desde los grupos politiqueros de Miami y les siguen los actores de segunda categoría de la oposición mercenaria cubana. Así ha sucedido con la visita a Cuba del Príncipe Carlos de Gales y la Duquesa Camila de Cornualles. Los medios corporativos y de la contrarrevolución hablan de una visita "controversial" o "polémica".
No bien se supo del viaje, un furibundo anticubano, el senador republicano Rick Scott, de Florida, dirigió un mensaje público el mes pasado pidiendo a Charles que cancelara su viaje debido al apoyo de Cuba al presidente venezolano Nicolas Maduro y a la "larga historia de la isla de perseguir y encarcelar a sus desertores y reprimir a su gente".
El legislador británico Julian Lewis, presidente del comité de defensa, dijo: "¿Cómo puede ser correcto enviar a miembros de la realeza de alto rango a los comunistas cubanos de quienes depende Maduro?", publicó The Daily Beast. Las mismas matrices de opinión y mentiras.
A continuación los ejecutores mercenarios actuaron: en redes sociales adoptaron el hashtag #RoyalShame y acusaron a la realeza de "participar en un programa de propaganda cuidadosamente organizado para realzar la imagen del régimen comunista criminal". La misma genuflexión mercenaria.
Sin embargo, la pareja real está en Cuba. La prensa del Reino Unido se hace eco hoy de la visita a Cuba del príncipe Carlos y su esposa Camila, informó Prensa Latina desde Londres.
Otras televisoras del país y los diarios de circulación nacional también dedicaron este lunes sus espacios matutinos de noticias a reflejar la llegada de la pareja ayer a La Habana.
The Telegraph, por ejemplo, publica una foto del príncipe Carlos cuando se dispone a rendir homenaje al Héroe Nacional de Cuba, José Martí, en la Plaza de la Revolución, con la icónica imagen del guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara de fondo.
La pareja real, que llegó a Cuba como parte de una gira caribeña, tiene previsto recorrer este lunes el casco histórico de La Habana, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1982, antes de asistir a una cena que le ofrecerá el presidente Miguel Díaz-Canel en el Palacio de la Revolución.
Según el programa divulgado por la Casa Real británica, durante su estancia de cuatro días en Cuba, Carlos y Camila disfrutarán de una gala de ballet en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, y se reunirán con emprendedores del sector privado y con miembros de un club de autos clásicos británicos.
Visitarán además centros comunitarios y de arte, conocerán los proyectos cubanos en materia de agricultura urbana, combate a la violencia doméstica, preservación del medio ambiente y restauración patrimonial, y colocarán la primera piedra de un parque fotovoltaico que se construirá con apoyo británico en la Zona de Desarrollo del Mariel.
La pareja real visita Cuba y ya es un éxito de relaciones respetuosas, lo que no quieren los que atentan contra los cubanos con bloqueo y campañas desde sus laboratorios mediáticos.
#Cuba da la bienvenida al #PríncipeCarlos y a su esposa, la duquesa Camila de Cornualles. Nos honra recibirlos y mostrarles con orgullo la nación que somos. Hoy les recibiré y sostendremos conversaciones. La visita expresa el buen estado de nuestras relaciones #SomosCuba pic.twitter.com/l97Qwih6m5 — Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) 25 de marzo de 2019