La pérdida de un hijo. Tanatología

Por Manuelgross

PERDER UN HIJO.

Por Psict. Dyanna Meyer 

Psct. Gestalt y Tanatòloga

Es un dolor tan profundo, impactante, casi antibiológico,  antiexistencial   y enloquecedor que ni siquiera un nombre cientìfico, filosòfico, literario, bohemio, tiene.

Nadie ha podido bautizarlo, mas que cómo profundo dolor del alma, asi le llamo yo.

A todos aquéllos que hemos andado por estos  oscuros pasillos del dolor màs profundo del Alma, como padres y luego como profesionistas en la salud emocional,  o de cualquier otra disciplina , todos entendemos

el lenguaje ùnico que el ALMA emplea ante èsta perdida.

No se parece a ninguna otra.

Nos deja en estados diversos, desde la paràlisis  , que se mezcla a ratos con profundas reflexiònes, el inquietante cùmulo de cuestionamientos con los consabidos estados del duelo, revueltos y caòticos , àridos en esos momentos resultan poco comprendidos...

 Aun màs uno de ellos , el más sabio a la vuelta del tiempo... La ACEPTACION. ¿ Pero Como  aceptar ? 

Debe pàsar el sabio maestro que todo lo cura y que se llama  tiempo y hacer de nuestra mente un SITIO PROSPERO,  en el manejo de razones, que se tornan de  valor desde la espiritualidad.

LA ESPIRITUALIDAD. LA PSIQUE Y LA TANATOLOGIA AMOROSA.

Desde el espìritu, podemos caminar si bien cada quien a su paso, podemos hacerlo sanamente, librando la batalla del enojo, que puede ser ira si acaso la muerte del hijo fué con violencia, mala fé , asesinato o incluso suicidio.

Ahi si que el trabajo deberà ser cuidadoso y utilizando la PACIENCIA  ACTIVA como herramienta en la terapia.

La psicologìa Holística, enlaza la espiritualidad y la corporalidad, para trabajar con este dolor profundo del Alma.  En este espacio podemos darnos perfecta cuenta como investigadores , que la psique y el espìritu son habitaciones contiguas y cercanas , pero diferentes .