Número de páginas: 528
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Sinopsis: En 1934 los jóvenes Diego, Elisa y Martín dejan una España convulsa y al borde de la guerra civil y se trasladan a Francia con sus familias para comenzar una nueva vida. Allí, Diego y Elisa empiezan una historia de amor que acabará trágicamente.
Sesenta años después, ya anciano, Diego no se resigna a morir sin conjurar los fantasmas del pasado para que rindan cuenta de sus faltas y le devuelvan la paz a su conciencia.
Violeta, su nieta, embarazada y huyendo de su marido maltratador, lo acompañará mientras recompone todo un universo de secretos de los que no tenía la más remota idea…
Opinión personal: Este libro fue un éxito auto editado en Amazon, y ahora llega a todas las librerías publicado por Suma de Letras. Después de meses y meses viendo reseñas más que positivas en diferentes blogs me animé a conocerla.
La novela recoge dos historias lejanas en tiempo y en ubicacion pero unidas ambas por un mismo hilo conductor.
En la primera de ellas, Diego es un joven de Villaviciosa que lleva una vida como cualquier otro, un joven enamorado de Elisa, su novia, desde que tenía cinco años y fiel a su amigo Martín con quién comparte cada paso de su vida.
Ante el inminente estallido de la Guerra Civil, y temiendo que los españoles puedan verse salpicados por sus horrores, la familia de Diego y la de Elisa, ambas acomodadas, deciden marcharse a París, dónde podrán vivir más tranquilos y además podrán dar a sus hijos una educación superior y de mayor calidad es la Escuela de Bellas Artes. Diego se convertirá en arquitecto y Elisa en una pintora que intentará cambiar el curso de la historia. Esta parte ambientada en el Paris de Vichy nos irá aportando datos, tanto familiares de ambos jóvenes y su intensa historia de amor, como de evolución histórica y los expolios de obras de arte que sufrieron los principales museos y galerías bajo las órdenes del Führer.
La segunda historia que esconden sus páginas es la de Violeta, que acaba de descubrir que está embarazada. Y esa certeza es la que supone el impulso final que necesitaba para abandonar a Álvaro, después de años de malos tratos y humillaciones. Aprovechando que está sola en casa, coge a Zara, su perrita, y con un cuaderno entre su equipaje decide visitar a su abuelo, por ser la única familia que le queda, y recoger allí sus vivencias por escrito para recurrir a sus líneas cuando necesite fuerzas para no volverse a ver en brazos del hombre que tanto daño le ha hecho.
El hilo conductor que mencionaba al principio no es otro que Diego, ese joven arquitecto que emigró a París, que resulta ser el abuelo de Violeta, y que sesenta años después sigue enamorado de Elisa y vive buscándola en cada cuadro que pintó y hablando con sus fantasmas.
Aunque la novela histórica por norma general me resulta muy pesada e intento huir de ella, las pinceladas históricas de este libro me han resultado muy interesantes y enriquecedoras ya que te muestra los datos más relevantes de la mano de nuestros protagonistas formando así un contexto mucho más ligero, huyendo de la evolución puramente política para acercarse más a las implicaciones de ésta en el arte.
Debo confesar que algunas partes se me han hecho un poco pesadas, quizás para mi gusto podría haber sido un poco mas corto y contar lo mismo, ya que ciertos pasajes, en especial aquellos en los que Diego habla sesenta años después con Elisa, me han resultado un tanto reiterativos.
Obviando este detalle, ha sido una lectura cargada de emociones; la incertidumbre ante el estallido de la guerra, la ilusión mezclada con el miedo ante un nuevo comienzo en un lugar diferente, la ternura de la historia de amor que ambos viven, el miedo ante los problemas que pueden surgir... Pero sobre todo la impotencia ante las vivencias que Violeta recoge en su cuaderno y que explican las palizas y los insultos por parte de Álvaro, narrado de forma muy real y explícita por parte de la autora. Me ha encantado también la forma de intercalar ambas historias para ir entregándonos poco a poco las piezas del puzzle y que paso a paso descubramos al completo la historia de todos los personajes, con sorpresa final incluida.
Destacar el cariño que despierta el personaje de Diego en todas sus épocas y lo bien construido que está. Conoceremos a un joven enamorado capaz de renunciar a todo por la mujer a la que ama, a rechazar a cualquier otra que se cruce en su camino -por persistente que sea- y capaz de quedarse en un país apunto de estallar por anteponer los sueños de ella a los suyos propios. Pero también he adorado al Diego abuelo, mimando a su pajarito, dando cada paso que le quede en su vida para dejarle la verdad como herencia a su nieta.
Una novela cargada de personajes bien definidos, ambientes y descripciones bien desarrolladas, historias que intercalan a la perfección el amor y la guerra y un final inesperado.
Valoración personal: 8,5/10