Para utilizar este producto hemos de tener en cuenta:
- Para cambiarlo hemos de desvestir completamente al niño, dificultando así la propuesta de que colaboren en el desvestido y vestido, en especial durante el entrenamiento en el control de esfínteres. Por lo tanto, hasta que el niño consiga mantener el pañal seco y miccionar y defecar con frecuencia en el orinal, son más aconsables los pañales tradicionales.
- Son mucho mayores las semejanzas con el pañal que con unas braguitas o calzoncillos, y los niños así lo reconocen. No podemos utilizarlos una vez retirado el pañal para ir en coche, o de compras, porque ¡¡es lo mismo que ponerles el pañal de nuevo!!
- Son perfectos, para los 10-15 días previos a la retirada del pañal, cuando el niño ya tiene un control afianzado, y puede acudir al water, bajar su braga-pañal seca, miccionar y volver a subirlas, tal y cómo hará con la prenda interior en unos días.
Son una fantástica herramienta para facilitar el final del proceso de entrenamiento en el control del pis y la caca, ¡¡¡n, solo que el enfoque de la administración moderna exige una alta responsabilidad social en lo que se hace, así que los factores claves son: La supervivencia, que implica que el negocio está en una situación complicada, el crecimiento, lo cual es algo que todos deseamos, la diversificación, que implica la creación de nuevas líneas de producción y también puede ocurrir la disminución de esas líneas o bien otras estrategias como el Outsourcing para aliviar la carga de actividades, todos estos elementos son analizados en la planificación estratégica.