María Manuela de Portugal nació en Coimbra el 15 de octubre de 1527. La princesa de la casa de Avis era hija del rey portugués Juan III y su esposa, Catalina de Austria. Juan era hijo de Manuel I, llamado El Afortunado, y María, hija de los Reyes Católicos y, por tanto, hermana de la emperatriz Isabel, madre de Felipe. Catalina por su parte, era la hija póstuma de Juana la Loca y Felipe el Hermoso y la hermana más pequeña del emperador Carlos V. Así, la que se convertiría en la primera esposa del futuro Felipe II, era su prima con un parentesco muy estrecho por varias ramas familiares. María Manuela tuvo una infancia tranquila en la corte de los Avis donde recibió una buena educación digna de una princesa supervisada siempre por su madre. Catalina quería preparar a su hija para convertirse en una buena candidata para un buen matrimonio, algo que conseguiría gracias a la destacada influencia que ejerció sobre su esposo.
María Manuela de Portugal nació en Coimbra el 15 de octubre de 1527. La princesa de la casa de Avis era hija del rey portugués Juan III y su esposa, Catalina de Austria. Juan era hijo de Manuel I, llamado El Afortunado, y María, hija de los Reyes Católicos y, por tanto, hermana de la emperatriz Isabel, madre de Felipe. Catalina por su parte, era la hija póstuma de Juana la Loca y Felipe el Hermoso y la hermana más pequeña del emperador Carlos V. Así, la que se convertiría en la primera esposa del futuro Felipe II, era su prima con un parentesco muy estrecho por varias ramas familiares. María Manuela tuvo una infancia tranquila en la corte de los Avis donde recibió una buena educación digna de una princesa supervisada siempre por su madre. Catalina quería preparar a su hija para convertirse en una buena candidata para un buen matrimonio, algo que conseguiría gracias a la destacada influencia que ejerció sobre su esposo.