Después de los recientes reportajes exhibidos acerca del doping mecánico, y los reclamos de sanciones severas para quienes intenten este tipo de prácticas, la UCI ha salido a responder a las acusaciones de que sus pruebas no son confiables para detectar este tipo de trampas. Con lo cual, han salido a comentar que en la actualidad emplean el método de detección más eficiente que actualmente se puede realizar.
Expresando además que, la UCI a estado realizando pruebas para detectar el fraude tecnológico por muchos años, y con el objetivo de aumentar estas pruebas de eficiencia, se han estado probando algunos nuevos métodos de detección en el último año.
También, han manifestado que han apreciado las imágenes térmicas, los rayos X y pruebas de ultrasonido; pero con mucho, el método más rentable, confiable y preciso ha demostrado ser la prueba de resonancia magnética empleando un software que se ha desarrollado en colaboración con una empresa especializada. La exploración se puede realizar con una Tablet y permite al operador escanear el cuadro y ruedas de una bicicleta en un par de minutos.
Recordando, qué la prueba de resonancia magnética fue la que se utilizó para detectar un motor oculto en el Campeonato Mundial de Cyclocross en enero pasado, en Heusden Zolder; un test que se probó un poco más de 100 bicicletas (según declaran en UCI).
Afirmando que se han escaneado bicicletas en una gran cantidad de carreras en este año y seguirán realizando la pruebas en todas las disciplinas durante todo el año. Dejando en claro que, la cooperación de equipos y pilotos, ante el intenso despliegue de pruebas, ha sido excelente.
Detectores de calor alegan el uso de motores ocultos en carreras
Según un reportaje exhibido en Stade 2, el domingo pasado, y que anteriormente se habría publicado en el diario Corriere della Sera se comenta sobre el uso de un detector de calor de alto costo para apreciar los motores ocultos, que bien pudieron haber sido utilizando en carreras como la Strade Bianche en Toscana y la carrera por etapas Coppi e Batali.
Así, en el reportaje publicado en el Corriere della Sera, se afirmó que el detector de calor, que habría sido disfrazado como una cámara de video, logro detectar al menos siete motores diferentes que se utilizaron en la Strade Bianche y Coppi e Bartali (en dónde cinco motores bien pudieron haber sido escondidos en el tubo del sillín y dos en el buje trasero o cassette). Sin embargo, en el informe del periódico y el reportaje en televisión no se dieron nombres de los posibles ciclistas involucrados.
UCI respalda sus pruebas
Al final, desde el invierno UCI ha establecido normas estrictas en contra de lo que se describe como fraude tecnológico y ha realizado controles regulares para bicicletas previó al inicio de cualquier carrera, utilizando un dispositivo teslámetro azul en forma de Tablet que aparentemente detecta los campos magnéticos.
Sin en embargo, en Corriere della Sera describen que la Tablet de UCI no es de lo más confiable. Lo que ha producido la reacción de UCI, asegurando que el método de detección empleado es extremadamente eficiente y fácil de implementar.
Y tú ¿qué opinas?, crees que los ciclistas estén montando motores para incrementar su rendimiento y si es así ¿qué sanción piensas que deberían de aplicar? (publica tus comentarios en nuestro Facebook o Twitter).
Imágenes de tumblr.com y CH TV