La psicología o sicología, pues ambas palabras son correctas. ¿Qué es realmente, cómo se define? ¿Qué ramas hay y cuáles son aceptadas como válidas? ¿Cómo trabaja realmente un psicólogo? ¿Quién debe ir quién no a un psicólogo? Vamos a a dar respuesta a todas estas cuestiones con un lenguaje para todos los públicos.
Qué es la psicología
El diccionario lo explica de forma muy sencilla:
Ciencia o estudio de la mente y de la conducta en personas o animales.
Obviamente nos quedamos con las personas, que es su objeto principal. Pero en esta definición debemos fijarnos en la palabra “ciencia”.
La psicología es ciencia. Para acceder a la formación superior los estudiantes deben cursar una rama sanitaria.
Posteriormente los futuros psicólogos reciben una formación reglada y unos conocimientos científicos que les permitirán ejercer en el futuro como verdaderos profesionales.
En los últimos años también se ha avanzado mucho en el campo legal y hoy día una consulta de psicología es considerada un centro sanitario (como el de cualquier otro médico) y por tanto, debe tener y exigírsele dicha certificación.
Desde la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (México) aportan un esquema que aclara muy bien el concepto, además de aportar más información que resulta muy útil para entender qué es la psicología:
Esquema definición psicología. Fuente: uaeh.edu.mx
El esquema explica las áreas de estudio de la Psicología respecto a la conducta, los procesos mentales y la personalidad de los individuos.
Es importante notar que la Psicología, como profesión, abarca todo el proceso que va desde el estudio teórico (INVESTIGACIÓN), al análisis del individuo (EVALUACIÓN) y acciones para producir cambios, mejoras o correcciones (TRATAMIENTO) en el mismo.
Ramas o corrientes de la psicología
Al igual que ocurre en otras áreas de la ciencia, existen diversas corrientes.
En el caso de la Psicología, como explican en Psicologiaymente.net, estas ramas se definen en función de principalmente tres factores:
- Según el modo en que se investiga
- Según los conceptos y métodos que se utilizan para trabajar
- En función del objetivo que se persigue
Imagen cortesía de Saludterapia
Si vamos a acudir a un psicólogo es importante saber cuál es su corriente, porque nos haremos una idea de cómo trabajará, y sobre todo porque hay una serie de ramas que gozan del respaldo científico por su constatada validez y resultados, mientras que otras ramas aún están en fases más experimentales, por no hablar de otro tipo de terapias que ni siquiera pertenecer a la Psicología pero se “venden” como tal.
Veamos las principales ramas de la Psicología:
- Conductismo: se basa en la observación de la conducta del paciente. Simplificando se basa en la teoría causa-efecto, permitiendo identificar los comportamientos en base las causas, y ofrecer terapias o soluciones en base a cada una de esas causas.
- Cognitivismo: pone el énfasis en los procesos mentales implicados en el conocimiento y pensamiento, prestando atención por tanto a la percepción, la memoria, el aprendizaje, la formación de conceptos y el razonamiento lógico.
- Psicoanálisis: la archiconocida corriente unida siempre al nombre de Freud, que basa el tratamiento en el análisis de la infancia del paciente, sus sueños, actos fallidos y espontaneidad del pensamiento.
- Psicología humanista: trabaja con la experiencia no verbal y los estados alterados de la conciencia, teniendo en cuenta aspectos del pensamiento y el comportamiento no medibles, y teniendo como objetivo básico la felicidad de la persona.
- Psicobiología: basa el estudio científico de la conducta y la mente en la elaboración de teorías que expliquen y logren predecir las conductas y comportamientos, en términos neurobiológicos.
- Estructuralismo: esta rama de la Psicología plantea simplificar las investigaciones, reduciendo al máximo los procesos conscientes de la personas y estudiando así tres elementos: sensaciones, imágenes y sentimientos, a partir de los cuales tratar de estudiar y explicar los más complejos.
- Funcionalismo: en contraposición a la anterior, esta rama deja de lado las estructuras y se centra en los procesos y funciones de la mente, poniendo el énfasis en el comportamiento y la interacción de las personas con el entorno.
- Gestalt: se centra en los procesos psicológicos relacionados con la percepción, partiendo de que la mente es capaz de construir informaciones diferentes, partiendo de las informaciones reales que percibe el cerebro.
Fuentes:
Psicología – Teorías y sistemas psicológicos (Wikipedia.org)
Las corrientes de la Psicología más relevantes – (Psicologiaymente.net)
En la actualidad las corrientes más aceptadas y populares son la conductista y la cognitivista, que en muchos casos confluyen en terapias como la cognitivo-conductual, gozando del respaldo de la comunidad científica.
Intrusismo y corrientes sin garantías para las terapias
Slogan sobre intrusismo del COPCV
En la aplicación práctica de la Psicología, es decir, en las terapias psicológicas existe un alto grado de intrusismo, que además es creciente.
Muchas ramas de la Psicología fueron importantes en su día para poner los cimientos de la psicoterapia, pero quedaron obsoletas con el paso del tiempo.
Otras plantean interesantes cuestiones teóricas, pero carecen de una utilidad práctica a la hora de aplicarlas en terapia a los pacientes.
Y finalmente, lo más grave, existe un buen número de pseudo-terapias que nada tienen que ver con la Psicología, ofrecidas por personas que no tienen una formación superior en Psicología, pero que juegan con nomenclaturas y términos que confuden a los pacientes, incurriendo en grave falta de intrusismo laboral.
Desde Stop Intrusismo en la Psicología, sitio web ofrecido por el Colegio Oficial de Psicólogos español, ofrecen la posibilidad tanto de denunciar esta mala praxis, como también enlazan a distintos artículos que tratan de dar luz sobre este tipo de terapias no avaladas, pseudo-terapias y fraudes.
En uno de estos artículos se cuestionan (justificando cada una) las siguientes:
- Psicoanálisis
- Gestalt
- Bioenergética
- Programación Neurolingüística (PNL)
- Coaching
- EMDR
- Reiki
- Biodanza
- Flores de Bach
- Grafología
- Tarot y similares (obviamente…)
Fuente: Psicología para todos – Psicofrikadas
Esta es una opinión y sobre esto hay debate. Algunas de estas ramas pueden incluso ser un complemento o una herramienta, eso sí, en manos de un psicólogo titulado y cualificado.
Algunas otras pueden tener su utilidad, pero no estamos hablando de terapia psicológica, por lo que debe entenderse que es otra cosa.
Y un claro ejemplo de esto es el coaching, tan de moda, y muy eficaz para ciertas cosas, pero en ningún caso sustitutivo de una terapia psicológica.
En el otro extremo tenemos el ejemplo del tarot y sus variantes. No puede haber nada más alejado de la ciencia y de los servicios sanitarios…
Cómo trabaja un psicólogo
Un psicólogo en un profesional de la salud. Como explicábamos en otro artículo:
Un psicólogo entrena y educa a las personas en habilidades, para que ellas mismas puedan hacer frente a los problemas que puedan existir, reduciendo asimismo el malestar que provocan éstos. Un psicólogo no es un amigo ni alguien que se dedica sólo a escuchar, el psicólogo es un profesional de la salud mental que se dedica a evaluar, diagnosticar e intervenir en los problemas que se le plantean.
Fuente: Qué es un psicólogo y para qué sirve – Blog de Eclipse
Puede haber algunas variaciones en la forma de trabajar, según la corriente del psicoterapeuta, pero en general la terapia se divide en las siguientes fases:
- Acogida, primeros contactos en los que el psicólogo recabará toda la información posible del paciente
- Evaluación, el psicólogo continuará recabando información, estudiándola, complementando en ocasiones con cuestionarios profesionales, para llegar a un diagnóstico de la problemática del paciente
- Intervención, el psicólogo explicará al paciente qué hacer, qué cambiar, las técnicas necesarias para llevarlo a cabo, y le irá guiando y apoyando en este proceso
- Seguimiento, se revisarán los avances, los pequeños baches, para afianzar los cambios y mejoras del paciente y hacerlos más sólidos y persistentes en el tiempo, minimizando así las posibles recaídas
Evidentemente no todas los problemas y cuadros que presentan los pacientes son iguales, ni en gravedad, ni en tratamiento, ni en posibilidad de mejora o eliminación del problema o patología, por lo que estas fases deben entenderse únicamente como el proceso general de una terapia psicológica.
Fuente: The Times (UK)
Qué se debe exigir a un psicólogo
Antes hablábamos del intrusismo en la Psicología. Si antes de empezar una terapia, verificamos que el centro de psicología cumple con las obligaciones legales, ya tenremos el mínimo exigible al profesional.
Estos serían, en España, los requisitos legales para un centro de psicología:
- Certificado de Centro Sanitario, imprescindible para avalar que el centro y los profesionales cumplen con la normativa legal sanitaria
- Número de Colegiado en activo, de cada uno de los profesionales, requisito legal básico para ejercer. Para España, son públicos y accesibles desde los distintos Colegios Oficiales de Psicología autonómicos.
- Licenciatura en Psicología en todo caso, de cada uno de los profesionales, imprescindible para consultas generalistas y de prevención
- Master oficiales (Psicología Clínica, de la Salud, en estos momentos, ya que esto es algo que ha ido cambiando en el tiempo), para aquellos profesionales que realizan terapias con tratamiento e intervención psicológica.
Estos son requisitos legales. El mínimo exigible. Pero también hay una serie de factores que se deben tener en cuenta a la hora de elegir un buen psicólogo que nos dé garantías.
Es importante que se produzca una empatía entre profesional y paciente. Muchos gabinetes ofrecen una primera cita informativa, en ocasiones gratuita, para celebrar este encuentro, que sirve de primera toma de contacto y, en el caso del paciente, para poder conocer al profesional que le atenderá, ya que será en manos de quien se ponga.
Otro factor importante es la calidad de la atención. Uno de los mayores problemas de la sanidad pública en España es la lentitud para acceder a citas de psicología, lo que se deriva irremediablemente en una atención de mala calidad, por muy bueno que sea el profesional.
Pero es que además, en los centros privados a veces también se producen estas saturaciones, por lo que hay que informarse bien al respecto. Si tenemos un problema cardiaco, una rotura, un bulto, no concebimos esperar semanas ni meses para una cita, ¿cierto? Pues lo mismo debemos pensar para las citas con los problemas de la mente.
También es interesante informarse de la experiencia y reputación del profesional, para asegurarnos de ponernos en buenas manos. Por supuesto hay que dar paso a jóvenes profesionales, pero sería conveniente que estuvieran respaldados en el mismo centro por otros con mayor bagaje. En la terapia la experiencia del profesional es muy importante.
Además de esa experiencia, según sea el problema por el que acudimos al psicólogo, en muchos casos será conveniente buscar a uno que sea especialista en la problemática. Por ejemplo, terapia de parejas, hiperactividad en niños, tratamiento del duelo, etc.
Más información sobre…
Cómo elegir un buen psicólogo
¿Cuándo puedo necesitar un psicólogo?
No existe una respuesta sencilla y rotunda, que sea válida para todos los casos.
Puede haber muchas razones. En algunos casos uno mismo se da cuenta, en otros casos lo recomienda alguna persona cercana, pero en ocasiones uno necesitaría ayuda profesional sin tener la menor idea de que esto es así, pasando el tiempo y agravando la situación.
Estas son algunas respuestas, para dar una buena aproximación, recogidas de algunos sitios de referencia:
Deberíamos acudir a un psicólogo cuando cualquiera de nuestras conductas, pensamientos, sentimientos o sucesos, o de terceros, afectan o han afectado a nuestra dinámica diaria o a la de los que me rodean, dificultándola o impidiendo su normal funcionamiento.
Fuente: Psicoglobalia
Síntomas que, en caso de tenerlos, determinan que es el momento de ir al psicólogo: no hallar sentido, pensamientos negativos, aislamiento, “mal de ojo”, miedo patológico, hipocondría, pérdida de control, adicción, estado ansioso, problemas de comunicación, apetito sexual.
Fuente: Siquia
Síntomas por los que se necesita ir al psicólogo: problemas para conciliar el sueño y descansar… se siente agresivo, irritable, con cambios de humor… se ha perdido el control… no se controlan las emociones, se llora con facilidad… somatización de los problemas… incapacidad para resolver situaciones… no se es capaz de analizar las cosas con objetividad… pensamientos negativos… deseo de morir… piensa que todo el mundo está en su contra… no es capaz de asumir la ausencia de una pérdida familiar… vive en soledad, sin orden…
Fuente: Sanitas
Símbolo de la psicología. Fuente: Wikipedia
Como vemos, hay muchos motivos y situaciones en las que debemos plantearnos visitar un psicólogo, y recogemos varias fuentes porque ninguna de ellas las recoge todas, ya que son muchas y diversas.
Debemos quedarnos con que si tenemos dudas sobre nuestro bienestar emocional, sobre si nuestros pensamientos nos desbordan o preocupan, sobre cualquier asunto relativo a nuestros pensamientos, sentimientos, comportamientos y actitudes, lo mejor será siempre hacer una visita al psicólogo.
El profesional solo nos propondrá aplicar una terapia, unas sesiones, si detecta con su criterio un problema o algo a corregir. Como psicólogo se debe a un código deontológico y siempre debe actuar con honradez.
Y no obstante, si no lo tenemos claro, siempre podemos acudir a otro profesional para pedir una segunda opinión.
Lo importante es no dejar pasar el tiempo sin hacer nada, porque lo más probable es que se agrave la situación. ¿Verdad que si nos aparece un bulto bajo la piel, que cada día crece su tamaño, nos preocupamos y vamos de inmediato al especialista?
Otras aplicaciones de la Psicología
No es objeto de este artículo repasar todas las aristas de este extenso universo que abarca la Psicología, pero podemos hacer una pequeña aproximación a otros usos y ámbitos en los que la Psicología tiene mucho que decir y aportar.
Psicología jurídica y forense
Básicamente es una aplicación de la psicoterapia como herramienta en los procesos judiciales. Los psicólogos capacitados pueden elaborar informes periciales, que son muy tenidos en cuenta por jueces para la toma de decisiones en los Tribunales.
Psicología industrial y de la organización o trabajo
Muchas de las herramientas de la Psicología son aplicadas por profesionales especializados en el mundo laboral, para procesos de selección de personal, integrados o asesorando departamentos de Recursos Humanos, realizando labores de mediación y resolución de conflictos laborales, etc.
Psicología del consumidor
El mundo empresarial, y especialmente las grandes corporaciones, cada vez se valen más de equipos de psicólogos especialistas para analizar el mercado, los consumidores, sus hábitos y comportamientos de compra, etc., siendo su estudio y conclusiones clave para la toma de decisiones estratégicas, comerciales y publicitarias de las empresas.
Psicología del deporte
También en auge, cada vez más deportistas tanto individuales como equipos disponen de profesionales de la Psicología, que velan por su bienestar emocional, motivación, concentración, etc., para conseguir el mejor rendimiento deportivo.
La psicología
Ciencia o estudio de la mente y de la conducta en personas o animales.
Así comenzaba este artículo y así lo queremos finalizar. Con una definición que lo dice todo, y que nos muestra la importancia de esta ciencia en nuestra sociedad humana, cuya evolución se debe sin duda a la capacidad de la mente.
Y ahí estará siempre la Psicología, estudiando, analizando y ofreciendo soluciones a los procesos y estados de la mente.
Sobre el autor
Jesús A. Robles
Informático. Responsable área online y formador en el centro Eclipse Soluciones.
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