Revista Psicología

La psicología ante la fibromialgia y la fatiga crónica

Por Eredolosi @redolosi
La psicología ante la fibromialgia y la fatiga crónica

La psicología tiene mucho que aportar en este campo ya que ambos trastornos afectan de forma directa y negativa en la vida de los pacientes (dolor, fatiga, alteraciones sueño, estado de ánimo, etc...). Además, y aunque no está demostrado que tengan causa psicológica, sí es cierto que los factores psicológicos influyen en su evolución.

Dentro de la psicología, la terapia cognitiva conductual es la que se ha corroborado científicamente como más eficaz. El objetivo de esta terapia es enseñar al paciente la relación existente entre el estrés, la ansiedad y bajo estado de ánimo sobre el dolor y la fatiga. Y, como la inactividad y el centrarse en la enfermedad potencian estos síntomas.

Lo fundamental es mostrarle a la persona afectada con fibromialgia o fatiga crónica que ella no está indefensa ante la enfermedad, puesto que existen estrategias y herramientas muy eficaces para reducir el impacto y el sufrimiento que conlleva.

Las principales técnicas son las enfocadas en reducir la ansiedad y el estrés, como la relajación, el autocontrol y la gestión de las emociones. También son importantes la programación de actividades para retomar el control de su propia vida. Y aquellas destinadas para atender a los pensamientos y creencias sobre la enfermedad. La reiteración de pensamientos negativos sobre lo que nos pasa, contribuyen a potenciar una visión más difícil obstaculizando la recuperación.

Una vez finalizada la intervención, es vital la prevención de recaídas; mostrarle a la persona como mantener la mejora alcanzada en la terapia.

Un dato a destacar es que muchas veces, estos trastornos vienen acompañados de otros problemas o por otros trastornos (problemas interpersonales, adicciones, trastornos de personalidad, etc...) por lo que habrá que incluir un tratamiento específico para ellos y así acelerar la mejora de la fibromialgia y de la fatiga crónica.

Para concluir, quiero recalcar la importancia de la implicación activa del paciente realizando las tareas y ejercicios que se le envíen para hacer en casa. Con un paciente implicado en su recuperación se tiene garantizado el éxito terapéutico en un porcentaje bastante alto.

Foto gratis: pixabay

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