La escena bíblica reflejada en el tímpano de la puerta es la que le da nombre a la misma puerta. Allí se representa el inicio de los cuatro evangelios con el nacimiento de Jesús.
El niño Jesús se muestra en una humilde cuna rodeado de ángeles que cantan y tocan diversos instrumentos musicales. A su izquierda está la Virgen María, a quien dirige su mirada el niño y éste es correspondido por su madre. A la izquierda de ésta están la mula y el buey que asoman sus cabezas por una pequeña ventana.
Arriba a la izquierda tenemos la anunciación a los pastores. En la escena aparecen cuatro de ellos bailando mientras otro toca una gaita. Sobre ellos, un ángel acaba de hacer acto de presencia para comunicarles la Buena Nueva.A la derecha del niño está su padre, San José, alegre, como si acabara de llegar al pesebre en este momento y se encontrara la sorpresa de que el niño hubiera nacido antes de llegar la comadrona y, a su espalda, otra figura femenina que porta un estuche en forma de cáliz en la mano derecha y que representa a la comadrona-partera que San José fue a buscar mientras nacía el niño.
Por último tenemos una escena de relleno en el fondo en la que aparece una ciudad medieval cuyos habitantes se asoman entre las almenas para ver el acontecimiento. Otros han salido de la población y observan, de pie o sentados, lo que ocurre. Otros incluso se han subido a los tejados para mirar. A la derecha podemos verlo. Mezclados con la población civil aparecen incluso algunos soldados cuyas cabezas van cubiertas por bacinetes con su almófar o camal. La ciudad se supone que es la cercana Belén o Bethlehem. Sigue leyendo >>>