4- Al principio, antes de que ocurra nada sexual, rompe de vez en cuando su espacio interpersonal. Es decir, rózale un instante un brazo, aprovecha para pasar un poco más cerca de lo normal cuando tengas que cruzar una puerta… que haya contacto físico, pero discreto. Nada de lanzarse sobre él, que contravendría la norma número 3.
5- Lleva la misma colonia siempre que quedes con él. Los olores se asocian a las personas y es importante tener uno específico. De esos que cuando tu no estés cerca y lo huela se acuerde de ti. También, si te vas de viaje, puedes rociar la almohada con unas gotas de tu perfume. Eso asegura que se acuerde de ti.