¿La reducción del estrés puede reducir los síntomas de alergia y asma?
Si tiene asma grave, quizás sepa que si evita ciertos factores desencadenantes, como el polen o el moho, puede ayudar a evitar síntomas como sibilancias y tos. Pero, ¿sabía que sentirse estresado también puede agravar los síntomas del asma?
El estrés y la ansiedad pueden afectar los cambios fisiológicos que causan que el cuerpo libere químicos y proteínas que pueden causar el estrechamiento de las vías respiratorias.
Los estudios demuestran que el estrés puede causar una serie de efectos negativos para la salud. Esto incluye causar más síntomas para las personas alérgicas y asmáticas . Tiene sentido que si desea que sus vacaciones sean más divertidas y menos complicadas, puede centrarse en los medios para brindar paz y bienestar.
Estos son algunos consejos para ayudarlo a mantener la calma y aliviar el resfriado, los estornudos y las sibilancias:
Recuerde hacer ejercicio: el ejercicio le ayuda a mantener su equilibrio emocional. Sin embargo, hacer ejercicio en clima frío puede empeorar los síntomas del asma. Si se presentan síntomas como tos, sibilancias, opresión en el pecho o dificultad para respirar cuando hace ejercicio en climas fríos, esto puede indicar asma no diagnosticada. Un especialista en alergias puede diagnosticar el asma y trabajar con usted para controlar los síntomas.
¿Cómo evitar los desencadenantes de alergia en climas fríos?
Calentar con ejercicios suaves durante unos 15 minutos antes de comenzar con ejercicios más intensos.
Cubrirse la boca y la nariz con una bufanda o mascarilla cuando haga ejercicio en climas fríos.
Tome los medicamentos recomendados por su médico especialista en alergia al asma para prevenir y tratar los síntomas del asma.
Debe considerar trasladar su programa de ejercicios al interior si la temperatura está por debajo de cero.
Use velas sin llama: aunque muchas personas pueden encender una vela para relajarse y encender las vacaciones de invierno, las velas perfumadas pueden desencadenar síntomas de alergia y asma. Por lo tanto, es mejor considerar una vela sin llama y una chimenea eléctrica. Esto tendrá un aspecto y sensación relajantes, pero no tendrá olor ni humo que lo hagan toser o jadear.
Mantenga la gripe alejada: durante una temporada específica, la gripe se puede transmitir cuando está cerca y en persona con cualquiera que la tenga. Sus ocasiones especiales pueden ser más estresantes que tener gripe, especialmente para las personas con asma.
Es importante asegurarse de vacunarse con anticipación y siempre lavarse las manos minuciosa y regularmente.
Si bien a algunas personas que tienen alergia al huevo se les ha dicho que no se vacunen contra la gripe, los estudios han demostrado que la vacuna es segura. Además, no contiene suficiente proteína de huevo para causar una reacción alérgica. Esto es cierto incluso en pacientes con alergia severa al huevo. No se necesitan precauciones especiales para la vacuna para las personas con alergia al huevo.
Algunos otros consejos: –
Elija protectores de almohadas y colchones a prueba de polvo: están tejidos firmemente para mantener los ácaros fuera de la ropa de cama.
No se acueste con las mascotas: si tiene mascotas, manténgalas fuera de la habitación para que su caspa no se acumule ni se adhiera a la alfombra ni a la ropa de cama.
Evite áreas altamente contaminadas: al igual que el polen, la contaminación del aire puede desencadenar ataques de asma en algunas personas . Si la contaminación es un desencadenante para usted, debe evitar hacer ejercicio cerca de autopistas o carreteras muy transitadas.
Debe tomarse un descanso cuando esté bajo el clima: si tiene una infección respiratoria y no se siente bien, el ejercicio podría ser más difícil. Date tiempo a ti mismo y a tus vías respiratorias para sanar, después de lo cual, puedes reanudar tu rutina regular de ejercicios.
Realice actividades amigables para el asma: nadar en una piscina cubierta es ideal. Esto se debe a que está haciendo un excelente ejercicio aeróbico en un ambiente cálido y húmedo.
Conclusión:-
La vida es demasiado corta para luchar contra las alergias o el asma. Para un tratamiento adecuado, debe visitar a un alergólogo conocido y, en caso de niño, debe acudir a un alergólogo pediátrico.