La regeneración urbana integral: el paso hacia la sostenibilidad de las ciudades *

Por Paisajetransversal @paistransversal
En el reto de la ciudad sostenible, el reciclaje de la ciudad consolidada es el desafío prioritario al que se enfrentan las ciudades europeas, donde el concepto de desarrollo sostenible está totalmente asumido como una variable multidimensional que implica acciones de mejora ambiental, económica y social en la escala global y a largo plazo. 
En este sentido en los últimos años hemos observado cómo la necesidad de actuar sobre la ciudad existente aparece en todas las agendas públicas. Así queda recogido también en la Agenda Urbana Española, por ejemplo. Sin embargo, son escasos los lugares donde estas promesas se han hecho realidad. La regeneración urbana integral continúa asociada a gestiones costosas e inversiones económicas elevadas, que equivalen a largos procesos de desarrollo de las intervenciones y a dificultades para ponerlas en marcha debido, fundamentalmente, a la falta de consenso y a deficiencias en los procesos de decisión.
 Frente a esta realidad, el ámbito profesional tenemos la responsabilidad de explorar vías alternativas de intervención en la ciudad que impliquen a distintos actores y sectores económicos y que hagan viable intervenir en áreas vulnerables de nuestras ciudades. Es por lo tanto fundamental construir propuestas metodológicas respaldadas por casos de éxito que consoliden un modelo de regeneración urbana eficiente con capacidad de incidencia real en la sociedad y en las instituciones públicas. 
Para alcanzar este objetivo Paisaje Transversal proponemos desarrollar procesos de regeneración urbana desde la perspectiva integral y participativa. Integrales porque entendemos que las soluciones urbanas no corresponden a una sola disciplina ni a un solo Área de Gobierno, y que todas ellas han de trabajar de manera coordinada para alcanzar soluciones comunes. Y participativos porque la población debe identificar los problemas, establecer las prioridades y colaborar en las soluciones. Se trata, pues, de generar dinámicas de corresponsabilidad entre todos los sectores que hacemos ciudad: ciudadanía, técnicos, políticos y agentes culturales y productivos, sin olvidar a los no humanos (ecosistemas y procesos naturales).
Este modelo exige que la figura tradicional del técnico se encamine hacia la posición del mediador, agente capaz de poner en diálogo perspectivas divergentes y a menudo contrapuestas, de transformar las reclamaciones vecinales en estrategias propositivas, y de implementar nuevas herramientas y canales de diálogo, que agilicen los procesos y eviten la actual descoordinación entre diferentes Áreas de Gobierno, así como entre éstas y la ciudadanía. 
Llevar a cabo procesos de Regeneración Urbana Integral y Participativa (RUIP) según lo descrito no está exento de complejidad, sin embargo. Para asegurar su viabilidad es preciso definir metodologías que le den soporte, así como herramientas que agilicen y faciliten el desarrollo de los procesos. Desde Paisaje Transversal planteamos, en este sentido, una metodología capaz de estructurar los procesos de RUIP, con el objetivo de garantizar su eficiencia, su nivel de respaldo y su relevancia: la Metodología DCP. Ésta se lleva a cabo a través de tres canales que estructuran los proyectos; tres estrategias paralelas en el tiempo pero transversales en el contenido, cada una de ellas con objetivos complementarios que en conjunto configuran el proyecto de manera integral. Se trata del canal (D) Difusión, el canal (C) Ciudadanía y el canal (P) Proyecto.
En cuanto a las herramientas necesarias para llevar a cabo procesos RUIP, hacemos uso de tres elementos clave, en continua revisión y reformulación, a partir de la experiencia de los casos prácticos:
  • Indicadores participativos [InPar]
  • Mediación y trabajo interdepartamental
  • Plan Integral de Acciones de Mejora y Tácticas Urbanas

Indicadores participativos [InPar]
Los Indicadores Participativos [InPar] nacen con el fin de dar una solución a la falta de relación existente entre los indicadores de sostenibilidad y la percepción ciudadana. Constituyen una herramienta que permite establecer una radiografía de un entorno urbano al relacionar indicadores de sostenibilidad con información cualitativa procedente de la opinión ciudadana, asegurando la presencia de la accesibilidad en ambas partes de modo transversal. Gracias a ello podemos analizar la calidad de aspectos ambientales, sociales, económicos y funcionales de una ciudad, y relacionarlos con la percepción que tiene la ciudadanía sobre los mismos, con el fin de obtener una visión integral de la complejidad del territorio, transparente e inclusiva.
Así pues [InPar] es una herramienta de análisis y gestión de la información indispensable de cara a facilitar la priorización de propuestas en las que es necesario tener en cuenta, de manera simultánea, las percepciones ciudadanas y las cuestiones técnicas. Los Indicadores Participativos trabajan de manera interrelacionada la información cuantitativa —indicadores de sostenibilidad— de la cualitativa —opinión ciudadana— organizando esta última de modo que puede ser relacionada con la primera para obtener una imagen final en la que se refieren ambos mundos.
A partir de la fotografía final de los Indicadores Participativos se generan visualizaciones e informes que detallan desde distintos enfoques los resultados obtenidos, como por ejemplo:
  • La enumeración de los indicadores de sostenibilidad más desfavorables y las percepciones ciudadanas asociadas a los mismos.
  • El desglose de los indicadores de sostenibilidad relacionados con las temáticas cualitativas menos valoradas.
  • La descripción del estado de los indicadores de sostenibilidad y de las temáticas cualitativas asociados a cada una de las áreas administrativas de la ciudad.

Finalmente gracias a las visualizaciones finales se extraen conclusiones con el objetivo de consensuar estrategias dirigidas a solucionar problemas desde la sostenibilidad y la percepción ciudadana.
Trabajo interdepartamental y mediación urbana

Para el desarrollo del estudio técnico intersectorial se debe conformar un equipo con técnicos de distintas áreas, lo que denominamos como "Grupo Interdepartamental". Con ellos se lleva a cabo el análisis integral del barrio que se materializa, además de por los estudios específicos, por medio de un sistema de indicadores de sostenibilidad urbana. Dado el carácter intersectorial de la iniciativa, resulta necesario determinar el papel de un equipo facilitador en el proceso, esto es, de mediadores técnicos. El equipo facilitador aplica las metodologías descritas en este artículo y para ello desarrolla principalmente las siguientes tareas:
  • Actuar como interlocutor imparcial entre ciudadanía, técnicos de la Administración y representantes políticos: plantear estrategias transversales entre estos grupos de actores interesados (lo que en inglés se denomina como stakeholders).
  • Traducir la información ciudadana en propuestas técnicas.
  • Coordinar las distintas Áreas de Gobierno implicadas en el proceso.
  • Dar respuestas creativas e innovadoras a las distintas actividades, propuestas y acciones a desarrollar durante el proceso.
  • Gestionar las herramientas digitales y los canales de comunicación necesarios para facilitar la inclusión y participación de todos los agentes.
  • Documentar los procesos, materializando las necesidades y las propuestas en documentos dirigidos a los distintos técnicos de las áreas de gobierno involucradas.

Plan Integral de Acciones de Mejora y tácticas urbanas
Como resultado de la implementación de la metodología y herramientas descritas en los procesos de regeneración urbana, se formalizarán las actuaciones de mejora a realizar en el barrio. Se especificarán los indicadores que se verán mejorados por estas intervenciones, así como los presupuestos o programas necesarios para abordarlas y sus plazos para su ejecución. 

Las actuaciones descritas en los Planes Integrales de Acciones Mejora (PIAM) se acompañan de «tácticas urbanas» se presentan como una propuesta innovadora basada en intervenciones estratégicas y demostrativas, que ahorran costes y amplían los beneficios: proyectos de pequeña escala, participativos y «testeables» (cuyos efectos pueden ser evaluados de manera rápida y sencilla, tipo test). Las tácticas urbanas o acciones de prueba destacan por ser proyectos urbanos desarrollados junto a la ciudadanía, con el fin de obtener la máxima aceptación y, a su vez, ampliar la implicación de la sociedad en la ciudad, facilitando el posterior proceso de gestión. Además, por ser propuestas estratégicas y medibles, sus resultados son objeto de evaluación. De esta manera, a través de intervenciones que precisan de pocos recursos económicos y temporales, disponemos de la posibilidad de corregir, adaptar u optimizar las actuaciones de mayor coste del PIAM.
Descritas las claves que desde Paisaje Transversal consideramos ineludibles para abordar la regeneración urbana integral y alcanzar, así, la sostenibilidad urbana, a modo de conclusión, queremos resaltar la necesidad y urgencia de desarrollar y dar a conocer casos de éxito que ejemplifiquen esta praxis y los impactos de mejora que se consiguen con ella a largo plazo.
En este sentido, en Paisaje Transversal hemos puesto en marcha, a lo largo de nuestra trayectoria, distintos procesos de regeneración urbana integral y participativa, como los de Virgen de Begoña, (Madrid), o los barrios de Sant Miquel y Nucli Antic de Olot (Girona), ambos en un estadio prematuro para evaluar beneficios a largo plazo, pero de s cuales ya pueden valorarse primeros resultados de las intervenciones:
  • Aprobación de entre 20 y 30 intervenciones de carácter urbano, ambiental, social y económico a desarrollar durante ocho años.
  • Apropiación y compromiso de la población con las propuestas para conseguir la transformación del barrio en un lugar más sostenible.
  • Ejecución de las primeras intervenciones para la mejora de los espacios públicos más degradados y fomento de la movilidad peatonal.
  • Concienciación ambiental y ejecución de huertos urbanos como lugares de ocio y de autogestión.
  • Aumento de redes de colaboración entre agentes culturales, sociales y económicos y desarrollo de actividades conjuntas que impulsan la actividad socioeconómica.

* Actualización del artículo incluido en la publicación La participación en la construcción de la ciudad de Jaume Blancafort y Patricia Reus, Universidad Politécnica de Cartagena.
Imágenes:

01: Fotografía aérea del Nucli Antic de Olot.
02. Tabla de indicadores participativos en el proyecto Olot Més B –Nucli Antic. Fuente: Paisaje Transversal
03. Grupo interdepartamental OlotMés B. Fuente: Paisaje Transversal
04. Plano de las actuaciones del PIAM Sant Miquel. Fuente: Paisaje Transversal