La gran Aretha Franklin se ha ido pero nos ha dejado el recuerdo de su arte en vinilos preciosos guardados como oro en paño, en discos compactos, e incluso nos alegró en una ya de por sí buena sesión de cine con su contribución inesperada, un cameo que merece la pena ver de nuevo como despedida de una grande entre las grandes de la música del siglo XX:
Allá donde hayas ido, Aretha, seguro que estarán encantados de hallarte.