La ley del parlamento permitía el aborto libre hasta el tercer mes, medida que no contemplaban los países que ya regulaban la interrupción del embarazo. El Gobierno de Francisco Largo Caballero de la mano de la ministra de sanidad Federica Montseny, a la sazón la primera mujer que ocupaba un ministerio en España, a la vez que el primer miembro de la CNT que participaba en un gobierno, llevo a cabo un plan para hacer una ley similar a la catalana, pero se encontró con la oposición de la mayoría de los miembros del ejecutivo, aun así busco la manera de aplicar la ley en todo el territorio de la república controlada por las fuerzas democráticas. Como luego recogería en sus memorias:
"Tuve que recurrir al subterfugio de extender al resto de la España republicana los beneficios del decreto sobre el derecho a la interrupción artificial del embarazo adoptado por la Generalidad de Cataluña. Debía buscarse una solución al drama de miles de mujeres que, cargadas de hijos, recurrían a medios extra medicales o caseros para suprimir embarazos no deseados (...). Había que evitar la hecatombe de mujeres que eran víctimas de maniobras abortivas que las mutilaban para siempre y que, en muchas ocasiones, les costaban la vida". "Todo escrúpulo religioso o de otra índole pesaba poco en la vida de las mujeres que debían afrontar tal estado de cosas".
Al igual que durante la dictadura, al igual que pretende el gobierno neofascista actual, la ilegalidad del aborto libre hace florecer practicas clandestinas fue y será una de las principales causas de muerte de las mujeres. Nada tiene que ver la altura ética, moral y solidaria con la inutilidad y falta de escrúpulos de la actual ministra de sanidad, Ana Mata, el actual ministro de Injusticia, Alberto Misógino Gallardón o el resto de gobierno del muy corrupto Reino de España.La victoria de los golpistas sobre las fuerzas democráticas, su mentalidad machista y cerrada, pero sobre todo hipócrita, pues es sabido que las hijas y mujeres de aquellos “fariseos” de ministros y altos cargos del Falange, iban con el dinero robado a los españoles, a abortar a otros países. Los bastardos hijos de aquel Régimen pretender volver a esos oscuros tiempos de humillación de la mujer.
Fuentes utilizadas para el presente artículo: Diario Público y Wikipedia