Dirigida por Dan Gilroy (El legado de Bourne), Nightcrawler es una película cruda, sucia, oscura, de la que no podemos apartar la mirada, que nos habla de esas personas que trabajan las calles en las noches de Los Ángeles, pero no de ese trabajo que todos nos imaginamos. Nos habla de personas que viven de mostrar al mundo el sufrimiento de otras personas, sufrimiento grabado cámara en mano para luego ser mostrado en los informativos de las cadenas de televisión. Noticias, que a veces también nos encontramos en las televisiones de España. Como dice un personaje durante la ficción: “Si hay sangre, hay noticia”
Su protagonista Jake Gyllenhaal (Brokeback mountain, Animales nocturnos) hace el personaje de Lou Bloom. Como otro famoso Bloom (Leopold Bloom en la novela de James Joyce, Ulises), su personaje deambula por las calles, perdido (“Estoy perdido” es la frase de Lou que abre la película), observando detenidamente a la gente a su alrededor, estudiando sus comportamientos para sacar provecho de ellos.
La caracterización del actor es muy meticulosa; destacan sus ojos, grandes, siempre abiertos, sin pestañear, como dos videocámaras, grabándolo todo; destaca su piel blanquecina, mostrando la vida nocturna del personaje; destaca su delgadez, no descansa nunca, siempre aprendiendo, siempre buscando la manera de prosperar. Pero a que precio.
La suerte de Lou es conocer primero a Joe Loder (Bill Paxton), otro nightcrawler; a Nina (Rene Russo, esposa de Dan Gilroy), la directora de los informativos nocturnos de una cadena de segunda; y a Rick (Riz Ahmed), a la que contrata como becario en su “próspera empresa de noticias para televisión”.
Durante su descenso a los infiernos, donde el personaje pertenece, descubrirá el éxito. Pero ese éxito se sustenta en el horror y muerte de otros (Nina le dice que “la mejor víctima es la gente blanca, adinerada y de barrio agradable; la víctima ideal sería una mujer gritando por la calle con el cuello cortado”)
Pero no es el único que se aprovecha del mal ajeno. Asi, ante la pregunta de la empleada de Nina de si “¿vamos a mostrar esto?”, refiriéndose a las imágenes que Lou le ofrece, ésta no duda en emitirlas: “quiero algo de lo que la gente no pueda apartar la mirada”. Y todos somos cómplices. “Estas imágenes pueden herir la sensibilidad de los espectadores” se proyecta antes de la emisión del video para hacer más atrayente su visionado.