Establecer una rutina de sueño para mi bebé fue lo mejor que pude hacer en sus primeros días de nacido. Gracias a que comencé temprano con una rutina, mi bebo se acostumbró a dormir rápido y tranquilo. Fue un proceso de aprendizaje para ambos pero tan pronto conocí la llamada "Rutina de 3 pasos", se me hizo todo más sencillo. Esta consta de:
1. Darle un baño al bebé con agua tibia.
2. Darle un masaje para relajarlo.
3. Acostarlo en su cama o simplemente acunarlo en mis brazos y amamantarlo.
Así hacía todas las noches y la verdad es que me funcionó perfecto. Mi Coco se dormía rápido y tranquilo. Incluso, ahora que tiene 5 años, esa sigue siendo su rutina de sueño. Sabe que, tan pronto se da el bañito, viene el masaje y luego para la cama.
¿Qué puedes hacer tú?
- Deja todo preparado antes de meterlo al agua. Es importante que tengas todo listo así todo fluye y es más sencillo. Llévate la toalla, su jabón líquido y sus juguetes.
- Aprovecha ese momento. El momento de bañar a tu bebé es perfecto para conectar. Háblale, cántale y juega con él.
- Utiliza productos que te ayuden en el proceso. Existen productos clínicamente comprobados que ayudan a dormir a tu bebé mejor. Se debe a que tienen aromas calmantes como lavanda o camomila y están hechos específicamente para la delicada piel de tu bebé.
- Que el masaje sea para relajarlo. Un masaje suave en algunas de sus extremidades como manos, hombros y pies lo llevarán directo al sueño.
- Prepara el ambiente. Cuando vayas a dormir a tu bebé, la habitación debe estar con luz tenue y puedes, incluso, utilizar algún sonido suave que lo ayude a calmarse. Algunas mamás prefieren el silencio pero otras optan por cantarle alguna canción de cuna.
- Recurre a tus brazos. Si hay algo que calma a un bebé son los brazos de mamá.
Fotos: ©SerMadrePR.com-Derechos ReservadosModelo: Yesail Daniel de un mes de nacido. Su mami lo baña dos veces al día para que siempre esté fresquecito.