Alten se licenció en Educación Física en Penn State University, posteriormente obtuvo un máster en Medicina Deportiva en la University of Delaware y se doctoró en Educación por la Temple University. Luchando por mantener a su familia, decidió escribir una novela en la que había estado pensando durante años. Estuvo trabajando hasta altas horas por las noches y fines de semana, hasta que finalmente terminó "Meg: A Novel of Deep Terror". Para poder publicarlo, Steve vendió su coche, y cuatro días después de ser despedido de su trabajo, firmó un contrato millonario con la editorial Bantam Doubleday por dos libros.
En 1997, Taylor estuvo trabajando en las profundidades de la Fosa de las Marianas junto a la Marina estadounidense en una misión de alto secreto. Dicha misión buscaba confirmar la existencia de una especie extinta de tiburón, Carcharocles megalodon conocida como megalodón y que podía alcanzar hasta 20 metros de longitud. Durante la inmersión, Taylor observa con horror cómo un megalodón se eleva desde las profundidades, lo que le obliga a salir hacia la superficie rápidamente, aunque causando la muerte de algunos de sus compañeros.
Alten convirtió a MEG en uno de los libros importantes de la Frankfurter Buchmesse, la feria del libro de Frankfurt, donde consiguió que se vendiera a más de veinte países. Esta primera parte de la serie llegó a todas las listas de los libros más vendidos, incluyendo el número 19 en la lista del New York Times, y convirtiéndose en una popular serie de radio en Japón. En 2015, se publicó la edición ampliada y revisada de esta primera parte, incluyendo "Meg: Origins", publicada en 2011 en formato e-book.
El éxito de la novela llevó a Alten a escribir "The Trench", secuela publicada en mayo de 1999 y en la que continúan las aventuras del paleobiólogo Jonas Taylor y sus estudios sobre el megalodón.
Es interesante la aparición en la trama de otro animal del pasado como es el Kronosaurus, un tipo de plesiosaurio que vivió durante el Cretácico Inferior, y que ataca a algunos de los personajes de la novela. Además, se menciona a Osama Bin Laden como uno de los inversores de Benedict Singer, magnate que controla el Instituto Tanaka.