La salud dental del bebé

Por Pequelia @pequelia

Cuando tenemos un bebé procuramos tener bajo control todos los aspectos relativos a su salud. Junto con las visitas periódicas al pediatra, que nos irá orientando sobre el crecimiento del bebé y realizando los chequeos correspondientes, está nuestra observación y cuidado como padres y madres para detectar cualquier síntoma de enfermedad, molestia o problema de salud del bebé.

Pese a encontrarse en sus primeros meses o años de vida, la higiene dental también es un aspecto importante de la salud del pequeño que se debe trabajar desde los primeros meses. No pensemos que la higiene bucal empieza con el nacimiento de los primeros dientes, sino que ya en los meses iniciales podemos iniciar la limpieza de las encías con gasas húmedas, dedales de silicona o paños humedecidos. Eso prevendrá al bebé de posibles infecciones en sus encías.

Cuando nazcan los primeros dientes, sobre los seis meses, continuaremos con una limpieza adecuada con el mismo sistema. A partir del año ya podemos introducir el cepillo de dientes, adecuado para su edad, bien sólo con agua o con muy poca pasta de dientes. Con todo este procedimiento estaremos, por un lado, educando en unos hábitos de higiene correctos a nuestro pequeño, y por el otro haciendo una importante prevención de infecciones o caries en presente y futuro.

Pese a todos estos cuidados, siempre cabe la posibilidad de que aparezca algún tipo de problema relacionado con la salud bucal que requiera la intervención de un especialista. En este sentido, las clínicas dentales cuentan con profesionales que tratan aspectos comunes como las caries, el mal crecimiento de los dientes o cualquier otra anomalía. Un buen ejemplo es Propdental, que dispone de todos los medios para tratar la higiene bucal de los más pequeños. Un caso habitual es la aplicación de fluoruros tópicos ante el riesgo de caries que pueda tener el niño.

Con todo, buenos hábitos y constancia permitirán que desde pequeños y hasta adultos nuestra salud dental sea óptima.

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