En esta ocasión vuelve a emocionarnos con un retrato de familia, en concreto tres hermanas, que descubren la existencia de una cuarta hermana concebida por una segunda mujer de su padre. Su relación con ella, los miedos que las invaden, la adaptación y la culpa son sólo algunos de los aspectos que destacan en este fantástico film. Aún nos preguntamos por qué Cannes no quiso premiar a uno de los títulos del año.
No es una mala película, pero desde luego no es apta para todos los públicos. Lejos de lo que pueda parecer, apenas hay acción aunque destaca su fantástica fotografía y un vestuario realmente impactante.
La historia cuenta el vacío de un hombre que, aprovechando un viaje para dar una conferencia, intenta encontrar una mujer que le acompañe esa noche y comparta habitación de hotel con él. Poca originalidad en la trama aunque se nota una enorme creatividad en la técnica. Un experimento de bello resultado.
Ha tenido bastantes adeptos en la capital donostiarra, pero personalmente me parece una película muy tramposa y dirigida a un espectador friki que le pueda hacer sentirse especial al verla.
José Daniel Díaz