La socialistitis complicada con parditis aguda

Publicado el 20 enero 2012 por Juanmajurado
Cuando anuncié la posibilidad de la próxima liberación del Sr. Blanco y, posteriormente, la confirmación de este hecho, y dado lo predecibles que son en el PPIA, ya dije que llegaría una "batería de excusas que los ex-independientes pondrán en marcha y a nadie convencerán" para intentar justificar lo injustificable; para intentar tapar la insolidaridad, la desvergüenza, la indecencia y la completa ausencia de ética; para seguir tratando a los almanseños y a las almanseñas como borregos sin capacidad de juicio. Y entre las esperadas posibilidades para conformar esa batería estaba, como así ha terminado siendo, que la argumentación de su defensa consistiera, básicamente, en atacar al resto del mundo. Es que, los pobres, como digo, son muy predecibles.
El Sr. López presa de la enfermedad que le corroe -la socialistitis complicada con parditis aguda-, y sabedor del aluvión de críticas que se les viene encima, ha dicho que los portavoces municipales renuncien a su sueldo, cuando en realidad ha querido decir que no se pague ni una perra a Paco Pardo, portavoz del Grupo Municipal Socialista, y a Pilar Callado, concejala socialista que lleva trabajando, en política y fuera de ella, "por y para" su pueblo toda la vida (no como otros, que han dedicado su existencia a vivir "de" su pueblo). Ya conocemos la máxima del Sr. López: a los sociatas, ni agua. Afortunadamente, y en contra de la creencia de los ex-independientes, la ciudadanía almanseña no tiene nada de tonta y ya nos conocemos todos. Por eso, sabemos que no tiene ningún futuro este, intelectualmente pobre, intento de soliviantar los ánimos ciudadanos y desviar el punto de mira de los verdaderos y reales objetivos: el Sr. Blanco, el Sr. López, la Sra. Tomás, los ex-independientes y la traición a su programa y a su electorado. 
El Sr. López, que no puede disimular su querencia y su nostalgia por aquellos tiempos en los que la palabra democracía no se podía ni mencionar, posee muy mala memoria. Quizá por eso ha debido olvidar que el PSOE en el Ayuntamiento de Almansa es el grupo mayoritario con 9 concejales y estamos  representando a 5161 vecinos y vecinas que depositaron en nosotros su confianza, lo que significó un crecimiento de nuestra representación (en votos y en ediles) a pesar de los malos tiempos que corrían para nuestro partido. Es lo que tiene la frágil memoria y no creer mucho en la democracia. Quizá por esto mismo su partido -por entonces el PIA, ahora PPIA- bajó en votos y concejales, reduciéndose a 1980 votos y tres representantes, lo que le llevó a calificar a los almanseños de ingratos y gente inculta por no votarle. ¿Qué hemos de deducir, entonces? ¿El PSOE no ha de tener posibilidad de ejercer, a pesar de haber ganado las elecciones, la oposición dignamente? ¿Lsocialistitis complicada con parditis aguda tiene cura? (la ciencia médica, hasta el momento, no se ha pronunciado). Para que todos nos enteremos, estas son las cifras de liberados y allegados de diverso pelaje:

Partido Votos Concejales Liberados completamente Liberados a media jornada Personal de confianza y allegados

PSOE 5161 9 0 2 1

PP 4537 8 4 1 2

PIA 1980 3 1 1 3


¿Soy yo, o es que existe una cierta descompensación entre representatividad y liberaciones? ¿No es el PPIA el más beneficiado en el generoso reparto de liberaciones? ¿No son ellos, sobre todo en los cargos no electos, los designados a dedo, quienes se llevan la mayor tajada? Nosotros no queremos más de lo que ya tenemos. En cambio, la ambición y el acaparamiento de cargos bien remunerados crece día a día entre las filas del PPIA, como vemos que ocurre con el Sr. Blanco. Los socialistas no tenemos nada que esconder, por eso aquí está la nómina de Paco Pardo, que cobra 879,72 € netos. Fruto de su escasa memoria, en sus declaraciones el Sr. López se olvidó decir que él, ahora que se ha convertido en concejal raso, también cobra, concretamente 306 € mensuales.
Para ahondar en la demagogia y el populismo exacerbado, el Sr. López ha hecho unos cálculos mediante los cuales dice que este dinero supone el sueldo mínimo de tres trabajadores. Bien, pero ¿ha calculado cuántos cientos de sueldos han supuesto para Almansa el continuo despilfarro realizado durante su mandato? ¿Cuántos sueldos supusieron la promoción de "Embajada" con dinero público para que miembros de su partido sacaran beneficio? Bastantes, aunque es imposible saberlo con exactitud pues, a pesar de que hemos requerido la información, jamás se nos ha dicho lo que se gastaron en este oscuro episodio. ¿Cuántos puestos de trabajo suponen el Museo y la Casa del Festero, ambos abandonados? ¿En cuántos puestos de trabajo se traduce el mantenimiento del convenio por 30.000 € anuales con Almansa 1707 ahora que ha perdido prácticamente su sentido? ¿Cuántos puestos de trabajo se podrían haber creado con el dinero que pagó a un abogado amigo suyo para denunciar al Secretario General del PSOE en el ridículo caso Marbella? ¿Y cuántos con los miles de euros invertidos en llevar a los tribunales la cuestión de la lesividad del AVE? Cuando alguien se sumerge en la demagogia, como constantemente hace el Sr. López, se ha de tener mucho cuidado pues es fácil que los propios argumentos se vuelvan en contra del demagogo. ¿Alguien sabe dónde está la plaza de garaje que iba a "regalar-sortear"? ¿Alguien sabe si se recaudó algo por la venta de boletos y a quién fue? ¿Alguien sabe que fue del local que iba a "ceder" a las asociaciones sociosanitarias? Por la boca muere el pez...
El peor alcalde que jamás ha tenido Almansa, el Sr. López, ha realizado, casualmente o no, estas vergonzantes declaraciones el mismo día en el que el jefe de su partido PPIA, el Sr. Núñez, ha hecho públicas las medidas de lo que él denomina plan de austeridad, o lo que es lo mismo, una colección de recortes que se lleva por delante servicios municipales y puestos de trabajo, un plan del que en seguida hablaremos. Y ha sido muy triste comprobar que, para que el Sr. Blanco pueda cobrar su recién estrenado sueldo como concejal completamente liberado, unos cuantos trabajadores hayan tenido que irse a la calle.