La sombra de la serpiente, de Rick Riordan

Publicado el 12 febrero 2013 por Oly

Editorial: Montena

Publicación: Octubre 2012

Serie: Las crónicas Kane #3

Genial, esto va de mal en peor. Apofis anda suelto sembrando el terror allí donde va. Sólo nos quedan dos días... Y, mientras todos nos dan la espalda. Un grupo de magos rebeldes, encabezados por Sarah Jacobi, nos han acusado a Sadie y a mí de haber provocado el caos y de que Set esté en libertad. Juran que acabarán con nosotros... De los dioses mejor ni hablar: nadie sabe donde se han metido, y los que quedan, como Ra, el mismísimo dios del sol, sólo piensan en chupetear galletas, babear y tararear cancioncillas sin sentido... Nunca hemos estado tan solos y tan desesperados; solo nos queda una última oportunidad: capturar la sombra de Apofis. Se me olvidaba deciros que nadie hasta ahora lo ha conseguido, así que, si sale mal, no estaremos aquí para contarlo.

La sombra de la serpiente pone punto y final a las aventuras de los hermanos Kane: Sadie y Carter. De nuevo me despido de una historia, unos personajes y una trama que me han encantado y enganchado de principio a fin. Así que, después de las reseñas de La pirámide roja y El trono de fuego, poco más puedo decir de esta trilogía que no haya recalcado ya hasta la saciedad. Pero bueno, lo diré una última vez y con el mismo énfasis y entusiasmo de siempre: ¡LEEDLA! ¡YA! ¡AHORA! ¡CUANTO ANTES! Y, como también he mencionado en algún momento, hacedlo todo el mundo, no sólo aquellos a los que se les recomienda por edad. He podido ver en varias librerías que estas tres novelas están relegadas a la zona infantil, prácticamente al lado de los libros para colorear y poco más... Error. Una lectura así es una joya para todo aquél al que le guste las aventuras, la diversión y, en definitiva, sepa apreciar todo lo bueno que aporta, que no es poco.

Continuaremos la historia seis meses después del final del libro anterior. La lucha entre el Caos y la Maat -orden justicia- es cada vez más intensa; el final está cerca y uno de los dos se proclamará vencedor. La acción será permanente, sin darnos tiempo para relajarnos. Esta es una de las cosas que más me gustan del libro y de la serie: el ritmo trepidante, manteniéndose hasta el momento álgido; desenlace que, os puedo asegurar, está a la altura de la historia. Pero además de la lucha entre el bien y el mal, seguiremos la guerra interna de La Casa de la Vida, así como la relación entre ellos, los magos, y los dioses de Egipto. De estos últimos volveremos a encontrarnos con los ya de sobra conocidos, como Horus, Isis, Osiris, Set, etc. Pero también conoceremos a algunos más, verdaderos descubrimientos que nos harán pasar situaciones hilarantes; una pena no haber podido disfrutar de ellos desde el principio.

-Sadie..., este es Shu, mi bisabuelo.

Entonces caí. Shu era uno de los dioses con nombre ridículo que ya había oído antes. Intenté situarlo.

-Ah, el dios de... las chancletas. No, espera. De los globos pinchados. No...

-¡Del aire!-exclamó Shu con voz silbante-. ¡El dios del aire!

-Lo que me gustaría es ser invisible, muchísimas gracias. Pero los humanos habéis ensuciado tanto el aire que cada vez me cuesta más. ¡Es horrible lo que habéis hecho estos últimos milenios! ¿Es que no habéis oído hablar de la contaminación atmosférica? ¿Compartir coches para ir al trabajo? ¿Motores híbridos? Y no me tires de la lengua con las vacas, que empiezo y no paro. ¿Sabías que cada vaca emite más de cuatrocientos litros de metano al día, entre ventosidades y eructos? Y hay mil quinientos millones de vacas en el mundo. ¿Tú sabes lo mal que sienta eso a mi sistema respiratorio?

Shu sacó un inhalador del bolsillo de la cazadora y aspiró el aire.

Tengo que destacar a los personajes principales, los cuales han evolucionado mucho desde el principio, pero no por ello han dejado atrás esas personalidades que les hacen únicos. Carter sigue siendo, como hermano mayor, y responsable del futuro del mundo -¿presión? nah...-, el más centrado y serio de los dos. Aunque en algún momento del camino ha cogido prestada parte de la ironía y el ingenio de su hermana. Sus fragmentos de la narración me encantan; aunque son un poco más lentos a causa de las descripciones que hace sobre objetos, lugares, etc. egipcios. Bueno, para qué engañarnos, me gusta precisamente por eso.

Total, que así fueron las cosas.

Sadie se fue a una aventura paralela con un desconocido y me dejó a mí la parte aburrida: descubrir la forma de salvar el mundo. ¿Por qué me resulta familiar? Ah, claro. Porque Sadie siempre hace lo mismo. Si llega la hora de avanzar hacia el objetivo, podéis contar con que mi hermana se lanzará, en plan déficit de atención hiperactivo, hacia una tangente lateral propia.

Por otra parte Sadie sigue siendo... Sadie. Graciosa, con unas ocurrencias disparatadas, diálogos chispeantes... Da mucha agilidad a la narración, lo que se nota en sus partes del libro. De todas formas también ha madurado, lo que se aprecia en según qué ocasiones.

Seguro que Carter os describiría la ciudad subterránea ahogándoos en detalles, con las medidas exactas de cada sala, la aburrida historia de cada estatua y jerogríficos, y añadiría notas de fondo sobre la construcción del cuartel mágico de la Casa de la Vida.

Os ahorraré el suplicio.
Grande. Lleno de magia. Bajo tierra.

Precisamente por sus personalidades tan diferentes, pero que se complementan perfectamente, es por lo que la trilogía me parece tan buena. Además, no nos podemos olvidar de las historias de amor. En el primer libro pudimos ver un par de pinceladas de lo que podría suceder en el futuro; en el segundo Rick Riordan asentó las bases de los romances de cada uno de los personajes; y en éste los podemos disfrutamos totalmente. Hay que tener en cuenta que ambos ya han crecido un poco, pero siguen siendo bastante jóvenes. Serán romances platónicas, con el encanto del primer amor. Tengo que decir que el más complicado es el de Sadie, con una elección de por medio... -Ains Anubis-. Sin embargo el final sorprenderá bastante. El de Carter es más serio, quizá por su carácter, pero que se disfruta por igual. El final me ha encantado, centrando la mayor parte de la acción en Egipto y la Duat -reino mágico y espiritual que coexiste con nuestro mundo-. Todo queda perfectamente cerrado, En definitiva, una trilogía que destaca por su originalidad, tanto por la civilización que nos presenta como por su forma de describirla. Su ritmo ágil, plagado de acción y repleto de momentos magníficos, cómicos, irónicos, divertidos... Una historia que también podría demostrar a algunos jóvenes, e incluso adultos, el motivo por el que nos gusta tanto la literatura. aunque si tuviera que destacar algo negativo serían una o dos cuestiones que descolocan un poco. Temas sin demasiada importancia pero que te hacen cuestionarte la explicación que da el autor.