Capítulo 8
pero justo cuando iba a empezar a explicarle todo lo que había vivido durante aquellos maravillosos días, sonó el teléfono. Su madre se levantó para contestar la llamada mientras Pepa se quedaba apenada en su silla, mordisqueando el bizcocho y tomando sorbitos de chocolate caliente. Necesitaba compartir con alguien todo lo que había visto.
Por el tono de voz de su madre, la conversación parecía muy seria. Pepa intentó agudizar el oído para captar las débiles palabras de su madre al teléfono, pero no acertó a descifrar más que unas palabras sueltas. Al parecer hablaba sobre su abuelo.
Su abuelo!!! Un frío escalofrío recorrió la espalda de Pepa cuando su madre colgó. Se acercó a Pepa con lágrimas en los ojos y se sentó junto a ella.
Con una voz entrecortada, intentando ahogar las lágrimas, Anna le contó a su hija que el abuelo estaba muy enfermo, que lo habían tenido que llevar a urgencias porque se había desmayado mientras jugaba al ajedrez con sus amigos. Por ahora estaba inconsciente y no podían decirle mucho más.
Pepa se sintió perdida, el abuelo, Su Abuelo, enfermo, en el hospital....
Anna preparó una pequeña bolsa con cosas del abuelo y salieron al frío anochecer camino del hospital. El papá de Pepa ya había llegado, avisado por los compañeros de partida del abuelo.
La habitación del abuelo estaba poco iluminada. Varios monitores mostraban números y datos que Pepa no alcanzaba a comprender. Se oía un bip, bip, que provenía de alguna de las máquinas. Y allí estaba el abuelo, tumbado en la cama, con tubos y sondas por todos lados. Estaba dormido y parecía en paz.
Pepa no pudo contener las lágrimas y empezó a llorar. Anna la rodeó con sus brazos y la atrajo hacía si, la cubrió de besos y lloró con ella.
Al cabo de pocos minutos, un hombre alto, de mirada afable, vestido con un uniforme azul y una bata blanca , entró en la habitación. Les pidió que salieran un momento para poder hablar con ellos fuera... Miró a Pepa y con voz suave le dijo: " Quédate junto a tu abuelo. Háblale, cógele la mano, el sabrá que estás aquí y le dará fuerzas "
Pepa se acercó a la cama mientras sus padres salían un momento fuera para hablar con el médico. Pepa se sentía tan perdida. Dubitativa, agarró la mano de su abuelo. Estaba caliente y eso reconfortó a Pepa.
El médico le había dicho que le hablara... Que podía decirle??? Tenía tanto miedo.
Entonces, recordó a Narmer, las pirámides, el templo de Abu Simbel con las estatuas de Ramses custodiando la entrada, la fina arena del desierto y el calor sofocante que hacía.... Y se dispuso a contárselo todo a su abuelo.
Justo cuando iba a empezar su relato, algo al fondo de la habitación llamó la atención de Pepa...
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La culpable de liarme en este cuento ha sido Estanjana, a la cual no se si darle las gracias o retirarle la palabra ( jejeje... Ya lo dice ella, tengo un lado quinqui ). El blog elegido para continuar la historia es Mamukis, que se que le hace mucha ilusión ( no como a mis "amigas" )... Solo espero que Mamuki Vidal no me odie por siempre jamás después de leer mi capítulo....
“La sonrisa de Pepa” consiste en un cuento cadena que empieza en el blog de *La Petiua Tina* es un cuento cadena escrito por mamás y papás bloggers.Seguir la cadena es muy muy fácil y sólo te ocupará un momento. Si eres elegid@ por una mamá o papá blogger sólo debes escribir el capítulo que le sigue al escrito por el Blog que te eligió. Así que si te eligieron deberías seguir la historia y conseguir el código (Get the code) y copiarlo al final de tu entrada del cuento. Una vez publiques tu entrada entra en ella y añade tu link (add your link) informando el nombre de tu blog y entre paréntesis el capítulo que has escrito.