Pero no debe ser nada fácil imponerse la obligación de empezar una nueva novela cada 8 de enero. Puede que las musas no estén por la labor. Y esa es la impresión que he tenido al leer La suma de los días.
Según ella misma explica al principio del libro, su agente, Carmen Balcells, le sugirió que escribiera algo sobre sí misma.
La suma de los días es una recopilación de anécdotas personales, de sus relaciones, de su familia, de su tribu, como ella la llama. Nos encontramos con una Isabel Allende cercana, divertida, siempre positiva y muy humana.
Tampoco me interesa mucho el "marujeo" ni su papel de abuela. Sí, en cambio, despierta mi interés en su faceta de escritora; cómo escribió tal o cual novela o sus reflexiones literarias.
De todas formas, es un libro entretenido y ameno que se lee con gusto y deja un buen sabor de boca.
¡Buen finde!