La supervivencia del pequeño comercio en el Centro de Santiago

Publicado el 16 diciembre 2015 por Arcorelli @jjimeneza1972

Una de las tendencias de una sociedad mercantilizada y ahora globalizada, se supone, es el reemplazo del pequeño comercio por el gran retail: Los almacenes dan paso a los supermercados. Así, por ejemplo, Ruiz y Boccardo en Los Chilenos bajo el Neoliberalismo (2014) nos recuerdan la:

‘abrupta disminución del peso de los comerciantes detallistas dentro de esta categoría responde a su lento crecimiento absoluto, cuya recuperación se dificulta cada vez más, dados los escasos intersticios que para tales formas de “emprendimiento” dejan los importantes grados de concentración predominantes en estos rubros económicos’ (p 127)

Sin embargo, de hecho no disminuyen absolutamente (que es lo que también dice la cita). Difícil y todo parece que es posible mantenerse como comerciante detallista, si bien parece que no puede expandirse como peso el nicho todavía existe. Allí entonces, hay una pregunta a hacer: ¿cómo resulta ello posible?

Mi experiencia es que, al menos en Santiago, existen diferencias muy amplias por sector en torno a la preponderancia y pervivibilidad de estos comercios. Hay comunas (el barrio alto en particular) donde este tipo de comercio es poco común, pero hay otros sectores donde ellos todavía tienen buena salud. En particular, hablaré a continuación de la situación en un barrio residencial de la Comuna de Santiago (al sur de la Alameda).

Si me ubico en la esquina donde vivo y camino sólo una cuadra por cada una de las cuatro direcciones me puedo encontrar con 20 negocios pequeños: 9 almacenes, 4 restaurantes, 2 panaderías, 1 botillería, 1 verdulería, 1 minisuper, 1 tienda de productos médicos alternativas, 1 cyber-café (más un OK Market que, siendo parte de una cadena, no lo cuento).  Esto en un barrio que, si bien está repleto de edificios (que pueden llegar a tener 500 departamentos cada uno), al mismo tiempo está a 3 cuadras de la Alameda y tiene 5 supermercados en las cercanías. Entonces, ¿por qué no todas esas personas simplemente compran en los supermercados? ¿Para qué van a los almacenes y similares? (que son, al final, más caros).

Algunas posibles dinámicas:

  1. Que dada la combinación de niveles de ingreso medios y medios-bajos (C2 y C3 para usar la nomenclatura usual) con departamentos relativamente pequeños no resulta viable realizar compra sólo semanalmente
  2. Que esto es aún mayor dado ciertos productos: Por ejemplo, no tiene sentido comprar el pan por la semana (y algunos de los productos para el pan tampoco, pensemos en la tan común palta)
  3. Que para la compra diaria, y dado el lugar, el almacén puede tener ventajas sobre el supermercado: Es más rápido, en particular porque varios supermercados cercanos o no tienen o tienen estacionamientos pequeños; y en más de alguna ocasión el producto no está en ese supermercado (los del centro suelen ser relativamente pequeños); o de hecho, precisamente para esos productos perecibles, el producto del supermercado es de peor calidad.
  4. Que dado el tamaño de los hogares en varios casos (muchos hogares unipersonales por ejemplo) esas ventajas se pueden acrecentar.
  5. Que incluso si esas ventajas de un pequeño negocio sobre un supermercado sólo son reales para un pequeño subgrupo de quienes viven en las cercanías, o incluso si sólo son reales para un pequeño subgrupo de las compras de quienes viven ahí; el mero tamaño de la población de las cercanías lo permite (población que además probablemente crecerá en los siguientes años, ya están construyendo un nuevo edificio de dimensiones similares a las mencionadas anteriormente en un espacio que antes estaba ocupado por casas de un piso y por estacionamientos).

En cualquier caso, que para ese modo de vida la compra en almacén puede ser algo relativamente estable, es una conclusión que parecen haber alcanzado incluso los arquitectos de la zona. Hay varios edificios que, de hecho, tienen ya incluido el espacio para negocios en su estructura.

¿A que viene esta larga descripción de lo que no son ni siquiera cuatro cuadras completas? A una lección que, de hecho, es metodológica: La cita inicial de Boccardo y Ruiz, que es producto de una macro-mirada, no da cuenta de todos los procesos. Para entender la subsistencia de estos negocios tengo que ver los procesos concretos que los permiten, y que a su vez podrían usarse para intentar explicar porqué hay sectores repletos de estos comercios y otros no (i.e el barrio alto con estructuras completamente diferentes de ingresos, de densidad, de ordenamiento para el automóvil etc.). Es a ese nivel que se producen los procesos que terminan produciendo el resultado global.

Y para mostrar de qué negocios (y de qué diversidad estamos hablando) algunas fotos: