En su menú tienen varias ensaladas divididas en frías y templadas. Entre las primeras encontramos la ensalada mediterránea, parecida a una mixta pero con pepino y pimiento rojo, o, por ejemplo, la mexicana, con pollo a la plancha, guacamole, tortitas de sésamo. En las templadas destaca por su originalidad una con morcilla de Burgos o la turca, con queso fresco, carne de ternera asada, arroz, pasas, etc.
Entre los entrantes y los segundos platos también encontramos esta mezcla. Lo mismo puedes pedir un risotto de setas y gambas que un gulash de ternera con puré de patata o bien huevos rotos, tajine de cordero, cordero al curry, enchilada, surtido de aperitivos de Oriente Medio y así hasta una veintena de opciones variadas.
Si vais en grupo es una buena idea pedir una de sus tablas temáticas. Se trata de tablas giratorias con diferentes platos de un mismo estilo. Por ejemplo, la tabla alemana tiene un surtido de salchichas con codillo asado, patatas, chucrut, puré de patata y ocho salsas diferentes.
Recomendamos la tabla árabe (también hay criolla, hindú, italiana, mexicana...) que lleva cordero con ciruelas, hummus, falafel, pan de pita libanés, ternera asada, kofkas de ternera, tabulé de cuscus, salsa de menta y salsa turca. Los sabores están muy conseguidos y las cantidades son suficientes para 4-6 personas si antes has cogido algo para compartir.
Los precios no son especialmente baratos pero es verdad que las cantidades son más bien grandes y en muchos casos son platos con una importante elaboración. Las tablas andan entre 25,60 la italiana y 39,95 la criolla. Teniendo en cuenta que es entre varios no es caro. Lo normal es que probando varios platos diferentes pagues unos 25 euros por persona aproximadamente.
El servicio es muy atento y te aconsejan sobre ingredientes y cantidades. El local es coqueto y colorido, con un toque mexicano.
Comida: 8,5Servicio: 8,5Decoración: 8,5Calidad/Precio: 9