La Taverna del Mastí colabora en el 8º Aniversario de Bollacos: Hambre de Cine.

Publicado el 27 abril 2019 por Mumbo @OMasti2012
La web "Bollacos: Hambre de Cine" cumple ocho maravillosos años... y Beatríz Jiménez Lobato (@Bollacos), responsable del blog y amiga de las redes sociales, ha contado con nosotros para que confesemos al mundo virtual cinéfilo nuestro placer culpable. Como no podía ser de otra manera, no hemos querido perdernos esta gran ocasión para hablar de cine, compartir todo aquello que nos apasiona, en una ocasión tan especial... uniéndonos a otros geniales blogueros en un post realmente maravilloso.
Nosotros hemos confesado nuestra especial debilidad por "Mientras dormias" (While You Were Sleeping, 1995) de Jon Turteltaub. Pues me he decantado por Mientras dormías (While You Were Sleeping, 1995) de Jon Turteltaub. Por aquella época Sandra Bullock alcanzó la popularidad gracias a que un año antes protagonizó junto a Keanu Reeves la cinta de acción Speed (Jan de Bont, 1994). Ya en el centro de todas las miradas, realizó la comedia romántica que nos concierne, con la premisa de arrebatarle el trono a la reina de la comedia por aquel entonces, Meg Ryan. El resultado fue una comedia que, aunque sea blanca y previsible, funciona como un reloj y es divertidísima.Posiblemente aún sea la mejor de las que ha protagonizado Sandra Bullock, o por lo menos es la más entrañable. Es que el reencuentro con Keanu Reeves en La casa del lago (The Lake House, 2006) de Alejandro Agresti me toca mucho las narices, a sabiendas que es un mal remake de una película coreana que me encanta, Il Mare (Siworae, 2000) de Lee Hyun-seung; que si no la habéis visto os la recomiendo encarecidamente.Volviendo a Mientras dormías, la he elegido debido a que, aparte de que es un filme que me encanta, atesoro una pequeña anécdota de cuando fui al cine a verla en su momento. Hay que mencionar que en aquellos lares era un adolescente que acababa de estrenar la mayoría de edad y asistía a las clases del instituto en el turno nocturno, por la razón de que empecé a trabajar en el bar de mis padres. Un día cualquiera, entre semana, en vez de venir a recogerme mi padre, vinieron mi madre y mi tía, que se lo habían ideado para ir al cine con la excusa de mi recogida estudiantil. Así que fuimos los tres al cine y la vimos (y cuando digo cine era de esos de antes, que solamente tenía dos salas y se estrenaba una película a la semana; unas salas que por desgracia han desaparecido). Al día siguiente continué con mi rutina; sin embargo, cuando salí del instituto se volvían a encontrar tanto mi madre como mi tía, esperándome para volver al cine a verla de nuevo. En fin, que fue una película que vi dos veces seguidas en el cine en aquella época, y fue la responsable de que tenga especial predilección por las comedias románticas. Sin duda es uno de mis placeres culpables. Con los años me he vuelto bastante exigente, y no veo cualquier cosa, suelo ser muy selectivo a la hora de visionar una obra cinematográfica; no obstante, a pesar de que Mientras dormías no es ninguna obra maestra, por el momento en que la vi y por mi curiosa anécdota personal, aún tiene un pequeño lugar guardado en mi corazoncito.
Si deseáis saber los PLACERES CULPABLES de nuestros amigos blogueros que han participado en este especial aniversario de BOLLACOS, solamente debes entrar en este enlace (NO TE ARREPENTIRÁS)...https://www.bollacos.com/placeres-culpables-del-cine/