Me he dado cuenta que preparar el té perfecto es algo que requiere de bastantes factores específicos y que de hecho, nunca tenemos en cuenta o que por lo menos muy pocas personas lo hacen. La temperatura es uno de esos factores claves a la hora de preparar nuestro té y dejarlo en infusión. La diferencia se siente de inmediato cuando empezamos a utilizar la temperatura correcta, tanto en su sabor como en su color. Por eso hoy vengo a hablarles de que la temperatura SI importa a la hora de preparar una infusión o un té.
Este año en el mes de Julio, tuve la oportunidad de ir a un taller de té, la experiencia fue muy pero muy agradable y sin mencionar todo lo que aprendí sobre mi bebida favorita y sobre la cultura oriental. En este taller fue donde me enseñaron que la temperatura es clave y que es lo que permite que el té o la infusión brinde todas esas propiedades. Esta temperatura debe estar entre los 85°C que es lo que más les recomiendo, o, los 90°C nunca a 100°C.
Es un factor que siempre debemos de tener presente y que por experiencia propia les puedo asegurar que cambio toda mi rutina de té, su sabor es mucho más agradable, delicioso y sin mencionar que nunca te quemas la lengua...es ideal. Si quieren saber como es la forma de preparar té blanco los invito a que miren un vídeo tutorial que hice en mi último post dando click AQUÍ.
Me parece muy curioso como es posible que las grandes marcas de té o las más reconocidas no tengan en cuenta esto, y que por el contrario, en las instrucciones de sus cajas de té sugieren que la temperatura del agua debe estar a 100°C. Lo digo para que lo tengan en cuenta...
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♥ Laura ♥