La teoría del todo de James Marsh

Por Miss_cultura @miss_cultura
Narra la historia de Stephen Hawking, la mente más brillante y el físico de mayor renombre de la época actual, y de Jane Wilde, la estudiante de arte de la que se enamoró mientras estudiaban en Cambridge en los años sesenta.

-ESTRENO VIERNES-





La teoría Del Todo es una maravilla, de esas películas que, con una imagen en este caso con la mirada de Eddie Redmayne (Stephen Hawking) lo dice todo sin palabras. La vida de una mente brillante, de un luchador nato, de una persona soñadora y sobre todo con un humor que hace que los días más oscuros en su vida, fuesen los más bonitos. Me ha sorprendido la faceta más personal de el señor Hawking, un personaje fascinante y una persona de carne y hueso que desde que se presenta en la película hasta el fin, sigue teniendo una misma creencia aunque luego sus ideas acerca del universo y del todo progresivamente vayan cambiando. La vida a través de los ojos de su mujer Jane, interpretada por una sensacional Felicity Jones de la que a casi la mitad de la producción cambia, empieza a transformarse y como espectador asistes a su cambio, y no la entiendes, sinceramente he intentado ponerme en su piel, pero no la llegaba a comprender como teniendo a alguien tan fascinante, tan increíble empieza a alejarse lentamente. Al final vas juntando las piezas y perdonas a Jane, pero te queda algo en el interior que no sabría como explicar. Desde la banda sonora, pasando por la forma de narración, y por los actores se complementan a la perfección. De los personajes el interpretado por David Thewlis es el que más destacaría por encima de los protagonistas, pero es que el señor Thewlis aunque aparece poco, en realidad aparece en los momentos más importantes y decisivos de Stephen. Es una película dura, te llegas a emocionar en muchos instantes pero también llegas a sonreír. Emociona de tal forma que algo dentro de ti, se mueve, te hace ver la vida con otros ojos. Una vida llena de más sombras que luces, pero una vida intensa. Me encantaría poder conocer a Stephen Hawking y poderle preguntar muchas cosas, pero también me gustaría ver la película una y otra vez. Esta película es un tesoro.


-Agradecimientos a la distribuidora