(Dirigida por Fred Zinnemann – USA 1953)
Un hombre debe ser lo que quiera ser.
El soldado Robert Prewitt (Montgomery Clift) llega a Hawai, Cuartel de Schofield el año 1941. Ha sido transferido del Fuerte Shafter. En algún momento de su vida fue primer trompeta y también fue boxeador. Ahora sólo quiere ser soldado y no aspira a más. El capitán le ofrece de todo para que sea boxeador estrella del Cuartel, Prewitt no quiere. Prewitt sabe lo que quiere, es decir ser soldado y añade: "Un hombre sin voluntad no es nada”.
El Sargento Warden (Burt Lancaster) quiere ayudar a Prewitt para que el Cuartel no le haga mucha presión por lo terco que es en no aceptar las condiciones del Capitán. Pero no, Prewitt está convencido de que hace lo correcto. Otra persona que lo quiere ayudar es el soldado Maggio (Frank Sinatra). Pero tanto el sargento como el soldado no lo ayudan tanto porque ambos tienen sus propios problemas, el primero esta enamorado de la esposa (Deborah Kerr) del capitán y tienen un romance a escondidas, el segundo es adicto al alcohol y anda buscando peleas.
Prewitt es sometido a una serie de humillaciones, todas las soporta por amor al ejército (así dice él). Conoce a Lorene (Donna Reed) en un club, se miran, se interesan el uno por el otro, conversan. Al tiempo ya están juntos los fines de semana. Un día Prewitt se entera que Maggio tiene problemas con el jefe del Lugar de Castigos, además el Sargento Warden anda medio borracho en un debate existencial acerca de su lugar en el mundo todo por la esposa de su capitán. Prewitt se involucra con ambos porque en el fondo quiere seguir dando tercamente su ayuda al ejército, siendo él ahora la persona que los puede ayudar. Sin embargo, las cosas no salen como él lo planifica, pronto la eternidad lo estará esperando.
Sensacionales diálogos de un film entre cuyos extras y por sólo mencionar uno se encuentra Ernest Borgnine.