"He pretendido hacer una estilización del espíritu maya, del concepto que tienen todavía los indios -filtrado desde millares de años- de sus orígenes, de su grandeza pasada, de la vida, de la divinidad, de la naturaleza, de la guerra, del amor, todo dicho con la mayor aproximación posible al genio de su idioma y al estado de su ánimo en el presente. He pensado el libro en maya y lo he escrito en castellano. He hecho como un poeta indio que viviera en la actualidad y sintiera. a su manera peculiar, todas esas cosas suyas. Los temas están sacaos de la tradición, e huellas de los antiguos libros, del alma misma de los indios, de sus danzas, de sus actuales supersticiones, y más que nada, de lo que yo mismo he visto, oído, sentido y podido penetrar en mi primera juventud, pasada en medio de esas cosas y de esos hombres".José Emilio Pacheco en el año 2011 escribe un articulo sobre Antonio Mediz Bolio, rescatamos lo que habla de "La Tierra del Faisán y del Venado":
La tierra del faisán y del venado apareció en 1922, el año central de la vanguardia, y probablemente fue escrito en parte cuando Mediz Bolio era secretario de la legación mexicanaen Madrid. Allí coincidió con Reyes y Valle Arizpe. El joven Reyes había hecho cinco años antes un hermoso ejercicio intertextual, Visión de Anáhuac, lograda tentativamente de "recordar con ayuda de la imaginación" la Tenochtitlan que apareció ante los ojos de los conquistadores. Las únicas fuentes posibles para Reyes fueron Cortés y Bernal que le heredaron no solo sus frases sino también su punto de vista. En ese momento Reyes no podía darse cuenta de que su Anáhuac, aunque con la más generosa y patriótica de las voluntades, estaba contemplado desde el Escorial.
El Monterrey del general Reyes, la fundidora y la cervecería era una meritocracia en que las nanas no le enseñaban su idioma a los hijos del amo como en la sociedad señorial yucateca. En 1920, antes de que se sintieran los efectos de la educación vasconcelista, únicamente un escritor yucateco, bilingüe desde sus primeros años, podía tener al mismo tiempo una visión no interna pero sí muy próxima del mundo indígena y un dominio de todo el instrumental literario (es decir, europeo) de su tiempo. En aquellos años un joven párroco de San Juan Teotihuacan aprendía de sus feligreses el náhuatl: para traducir la poesía azteca el padre Garibay ya no iba a necesitar ayuda, como otro precursor señorial: José Joaquín Pesado. Mediz Bolio no contaba con ninguna red protectora de prestigios. Los europeos no habían dicho aún que esas piedras talladas vistas por los crueles amos blancos del país como "ídolos" y "monotes" eran obras maestras en el arte de todas las tierras y todos los tiempos. La sociedad de castas que le permitió a Mediz Bolio aprender natural e involuntariamente el idioma maya y el gran sismo revolucionario se combinaron con su talento y su generosidad para producir La tierra del faisán y del venado. (El articulo completo lo pueden leer desde ACÁ).El libro de Antonio Mediz Bolio lo descargan desde acá: La Tierra del Faisán y del Venado.
También encontré un audio libro con la voz humana (no sintetizada) que se hace muy agradable de escuchar, lo descargan desde acá: Audio Libro La Tierra del Faisán y del Venado. (Musicalización: Claudia Guzmán; operación técnica: Fortino Longines; voces en la rúbrica: José Luis Guzmán y Gabriela Sosa; voz en la lectura; Joaquín Chablé).
Presten atención a la bella historia de la princesa Sac-Nicté, "La Blanca Flor" que volveremos a ver en la siguiente entrada.
Saludos y feliz día del libro.