La ¿tiranía? de la depilación íntima femenina (por Arantxa)

Publicado el 01 julio 2015 por Imperfectas
Que la presión estética sobre las mujeres es mayor que la que soportan los hombres parece innegable. Lo de la depilación íntima integral en las féminas es un ejemplo más. Impensable para nuestras madres, cada vez más mujeres la demandan en centros de estética y en clínicas de depilación láser, para acabar con el vello del pubis y genitales sin vuelta atrás

Lo cierto es que modelo de belleza que se vende es de mujeres sin un solo pelo de más. El vello se asocia a suciedad y resulta terriblemente antiestético en piernas y axilas femeninas. Poco a poco se va imponiendo una corriente que dicta que lo mismo sucede del monte de Venus para abajo.

La publicidad, los medios y el cine -el porno- proyectan un ¿ideal? de mujeres depiladas de forma integral. A veces lo insinúan de forma provocadora sin ambages. Estoy recordando esa publicidad del diseñador Tom Ford para Gucci, con aquella modelo en cuyo pubis el vello dibujaba una letra G. Tom Ford era experto en el arte de la provocación, pero ese es otro tema.
El vello genital femenino, ese antiestético problema, me comentaba una amiga ¿El vello ahí es antiestético? Yo no diría que es bonito. ¿Es más higiénico estar depilada? Quizás parezca lo más limpio, pero la depilación en la zona no es necesariamente lo más saludable. Cada vez más médicos arremeten contra esta práctica por cuestión de salud. El vello tendría su función protectora frente a enfermedades de trasmisión sexual, ya que amortiguaríael roce entre la piel y lesiones o heridas, logrando una mayor protección contra la penetración de cualquier tipo de infección o bacteria. El vello estaría por algo, no como un adorno antiestético o un residuo molesto de tiempos en los que el cuerpo de nuestros ancestros estaba cubierto de pelo. Se trataría de un escudo protector frente a los contagios sexuales.Ha habido famosas como Cameron Díaz que han clamado contra la tiranía de la depilación genital femenina. Se alzan voces que reivindican la belleza del pelo púbico y del área genital. Algunas famosas como Miley Cirus lo insinúan orgullosas. Muy probablemente es sólo marketing, pero no es la única. El Proyecto Arbusto se puso en marcha para reivindicar que cada mujer debe decidir sobre la depilación o no de su vello íntimo y que el matojo en la zona es bonito. De decidir se trata al fin y al cabo. Las hay que pueden convivir con su bosquecillo sin más problemas, incluso orgullosas. Para otras será fuente de molestias e inseguridades varias y un enemigo a batir. Cuestión de gustos y pareceres.