Llevo años preguntando a los locales por qué se regalan huevos de colores, toda clase de chocolatinas, calcetines y otras nimiedades en un día como hoy, y hasta la fecha sólo he conseguido averiguar que "esa es la tradición". O sea, que me quedo como estaba.
Así que he deducido recurrir a un gran buscador de Internet, que cree que lo sabe todo, y me he liado más aún, ya que hay numerosas explicaciones para el origen de esta práctica, que es lo que yo quiero saber. Por lo tanto, y puesto que no sé exactamente de dónde procede este invento, os cuento lo que he encontrado y que cada cual decida.
He leído que, ya en la Prehistoria existía la costumbre de comer huevos al final del invierno, aprovechando el retorno de las aves al hemisferio norte, y debido a que ya no les debían de quedar demasiadas provisiones ni habían podido cazar lo suficiente como para poder alimentarse.
Para los judíos parece ser que simboliza el endurecimiento del corazón del Faraón Ramses II, que no dejó salir a los judíos de Egipto, o también la fortaleza que demostró precisamente ese pueblo al lograr salir de allí e iniciar su éxodo.
Si nos fijamos en la tradición cristiana, el huevo estaría relacionado con dos aspectos:
- Con la cuaresma, durante la cual esta(ba) prohibido consumir carne, huevos incluidos; de manera que, al finalizar ésta, en un día como hoy, se aprovechaba para regalar y consumir todos esos huevos que las gallinas habían seguido poniendo durante este tiempo.
- Con un símbolo de fertilidad, que está relacionado a su vez con los festivales de primavera de numerosas culturas anteriores a la cristiana, y que en este caso se asocia a la resurrección de Jesús.
Al principio, los huevos se cocían y pintaban o recubrian de cera para poder diferenciarlos de los que eran frescos y así saber cuáles se consumirían durante el domingo de resurrección. A día de hoy, en países como Austria o Alemania se encuentran huevos de chocolate de todos los colores y tamaños posibles en cualquier tienda, a los que se añaden conejos de chocolate, cestas en las que se puede poner una especie de paja comestible (yo creo que son chuches pero nunca lo he probado) para crear los nidos, y toda una serie de dulces relacionados.
Y con respecto al conejo, diferentes culturas previas a la cristiana tenían a este animal por símbolo de fertilidad, de ahí su relación con la primavera y demás, como se ha indicado más arriba. Otra teoría dice que una madre alemana muy pobre no podía ofrecer dulces a sus hijos y decidió esconder huevos decorados en el jardín. Los niños, al ver a un conejo saltar por la zona, creyeron que había sido él quien había escondido los huevos y ¡tachán! Ya tenemos la leyenda.
Sea como fuere, hoy la gente se felicita las pascuas, se regala chocolate y algún que otro detallito en caso de que haya niños y se celebra el día con la familia.
A mí personalmente me parecen muy interesantes las interpretaciones de los huevos y la evolución de la tradición pero, como todo en este mundo, se ha convertido en una excusa más para el consumismo.
¿A vosotros qué os parece? Si conocéis alguna otra explicación sobre los huevos y el conejo de pascua o simplemente queréis compartir vuestro punto de vista, os invito a hacerlo justo aquí debajo.
Como se dice por aquí: Frohe Ostern! = ¡Felices pascuas!