Allá por el mes de abril Lidia de Juntando más letras me propuso dar un empujón a esta novela de Mercedes Pinto, organizando una lectura conjunta con a su blog y con El Buho entre libros. No me lo pensé dos veces y enseguida le dije que sí.
La respuesta por parte de los lectores a esta iniciativa fue todo un éxito, tanto que decidimos dividirla en dos fases y realizar en el mes de agosto un descanso. Ahora ya estamos finalizando esta segunda fase y el balance en cuanto a los comentarios que ha suscitado esta novela no puede ser más favorable.
Hay que dar las gracias a Mercedes por habernos facilitado los ejemplares que tenía en su poder y por habernos hecho disfrutar tanto con lo que ha escrito.
LA AUTORA
Ha publicados cuatro libros con «Ediciones B» con su línea digital «B de Ebooks»: "El talento de Nano" (novela juvenil), "La última vuelta del scaife»"(novela histórica), "Maldita" (novela trágico romántica ambientada en los años cincuenta) y "Pretérito imperfecto" (novela trágico romántica contemporánea).
Su novela, «El fotógrafo de paisajes» (intriga) ha sido publicada por «Ediciones Click», el sello digital de «Planeta de los Libros».
En la actualidad sus cinco obras publicadas pueden encontrarse en todas las plataformas digitales y "Maldita" en papel con «Ediciones B» en todas las librerías.
Mercedes en estos momentos se encuentra inmersa en el trabajo de creación y hace pocos días ha visto la luz su última novela Hijos de Atenea
ARGUMENTO
"La última vuelta del scaife nos relata la dilatada y escabrosa vida de Josué, un judío que huye de Alemania a los diecinueve años, en los albores del nazismo, empujado por un amor imposible. El protagonista nos narra su historia desde el ocaso de su aventura vital, cuando al fin alcanza la serenidad ansiada. Educado en un ambiente judío ortodoxo, necesitará una larga “travesía por el desierto” para comprender, a través de los dos grandes amigos que encuentra en el camino, que más allá de religiones y culturas existe un denominador común a todo ser humano: la capacidad de sobreponerse al instinto de supervivencia por el bien más preciado de la humanidad, el amor. Al igual que el scaife da vueltas incansable para convertir un diamante en bruto en una cegadora estrella, la vida girará alrededor de Josué durante casi un siglo, implicándolo en las situaciones más adversas e inesperadas, hasta hacerle comprender que en realidad su viaje no era una búsqueda, sino una huída de sí mismo. Nos encontramos ante una narración ágil y muy documentada. No es una novela histórica, sino una obra de auto-conocimiento dentro de un marco histórico convulso: la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial, y las secuelas que dejaron en el paisaje y en sus gentes".MIS IMPRESIONES
Lo primero de todo dar las gracias a Mercedes por esta maravillosa novela que ha hecho llegar a nuestras manos y así haber podido organizar esta masiva lectura conjunta que sin su ayuda hubiese sido mucho más difícil realizar.De La ultima vuelta de scaife seguro que se podrían decir muchas cosas, que es una novela de viajes, de aventuras, histórica, etc., pero para mi sobre todo ha resultado ser una novela de personajes, y por tanto los sentimientos, y estos son verdaderamente el alma de la novela.
Para mi La última vuelta del scaife es sobre y ante todo, un canto a la amistad.
Hay muchas novelas en las que los personajes no tienen fuerza y entonces es la trama la encargada de suplir esa carencia, pero en esta novela, si bien la historia ya de por si es poderosa, está bien armada y tiene un buen argumento, estás deseando saber que pasa y que les deparará a los protagonistas el futuro, el verdadero sustento de la novela, lo que hace de ella su razón de ser, son los personajes. Unos personajes potentes, muy bien perfilados, que evolucionan, unos personajes muy humanos, con sus defectos y virtudes. Y no estoy hablando del (yo diría los) protagonista(s), hablo de todos los personajes de la novela, también de los secundarios o de algunos que pasan, podríamos que decir, de puntillas por esta historia, porque todos ellos son importantes, todos tienen su razón de ser, todos aportan algo.
Me ha gustado mucho ese trasfondo multicultural que subyace en toda la historia, de respeto por otras religiones, razas o culturas del que tan faltos estamos hoy en día. Como la adversidad, la necesidad de salir adelante, de sumar en vez de restar, deberían primar por encima de cualquier diferencia, porque en el fondo las diferencias en realidad no son tales, sino que las hemos creado nosotros.
A tenor de aquí mencionado tengo que decir que me encandiló el padre Marcus, con frases como "Yo creo que la pregunta sería por qué nos empeñamos en agarrarnos a cosas que nos diferencian entre nosotros si estamos de acuerdo en lo importante. Es posible que tengamos miedo, miedo a perder nuestra identidad" o "Dime una cosa Josué, si estamos de acuerdo en lo fundamental ¿por qué no aceptamos nuestras diferencias. Es posible que los dirigentes de cada una de las distintas formas de culto sean los culpables y hayan empañado el auténtico mensaje en su propio interés, ya que su poder es proporcional al número de fieles, fieles que mantienen gracias a esas diferencias". Ojalá hubiese más gente como él que no hiciese de la religión una lucha y sí un punto de unión.
Tampoco se puede pasar por alto la gran labor de documentación que Mercedes ha tenido que llevar a cabo. No debe ser nada fácil situar esta novela en unos escenarios tan diferentes, con unos modos de vida y unas costumbres tan dispares, en los que además tenemos que tener en cuenta el peso del momento histórico en que se vivía y abarcando un espacio de tiempo tan amplio.
Y por si fuera poco nos ha dado detalles de la vida cotidiana, de la manera de afrontar los viajes y los traslados, y la hasta la forma de vida que se llevaba en los diferentes países en los que transcurría la acción. Hasta hemos vivido un largo viaje en barco.
Está claro que Mercedes tiene un don especial para escribir personajes y plasmar situaciones, lugares y formas de vida con detalles pero sin agobiar al lector con excesivos datos que no harían más que ir en detrimento del ritmo de la novela.
Todo lo anterior con un lenguaje cuidado, claro, fluido con el que nos sumerge entre las páginas de una historia que no deseamos dejar. No se va a tratar de una lectura apresurada, no hay prisa por querer saber más, aunque hay veces que nos pique la curiosidad de lo que está por venir, sino que queremos seguir disfrutando de esta lectura.
Sin empañar ni lo más mínimo esta estupenda novela yo le pondría dos "peros" (totalmente personales).
Uno de ellos es Josué, si bien tengo claro que con este personaje la autora quería reflejar y dar valor a cualidades como la tenacidad, la perseverancia, la paciencia, me ha costado entender esa "obsesión" por Abigail que le acompaña toda la vida.
El segundo es que hubo un momento en la lectura, durante algunas páginas, que me parecía que no avanzaba, que no seguía adelante.
Estos dos peros, que como he dicho son apreciaciones personales, no deben haceros dudar a lanzaros a esta lectura, ya que no enturbian para nada el resultado final.
En definitiva, no me queda más recomendar esta novela por esa bella manera en que Mercedes enlaza las palabras, crea historias y personajes, sobre todo personajes, porque en ellos vamos a encontrar unas personalidades muy humanas, muy de carne y hueso que seguro nos van a emocionar.
Ya sólo me queda decir que si queréis disfrutar de esta estupenda novela en este momento sólo podréis hacerlo en formato digital.