Europa investiga si las fuertes deudas con Hacienda y las subvenciones y facilidades que reciben de comunidades y ayuntamientos son ayudas ilegales que tendrían que devolver, lo que supondría la desaparición de varios equipos
Fuente: abc.es
Como los delincuentes de cuello blanco en este país tienen muy pocas posibilidades de acabar en la cárcel, porque todas las autoridades políticas, judiciales y deportivas los defienden y ponen toda las trabas posibles para que se haga justicia, va a tener que ser la Unión Europea (UE) la que se encargue de meter en vereda a los clubes españoles, y en particular a sus desalmados dirigentes, que han campeado a su antojo durante años haciendo y deshaciendo en las cuentas sin el menor rubor a manipularlas en su beneficio propio y siempre engañando a sus socios. Y si bien no todas las entidades deportivas han caído bajo las zarpas de estos depredadores vestidos de Armani, prácticamente todas se han visto beneficiadas en algún momento por las decisiones de los políticos de turno, que han advertido en las ayudas a los equipos de su ciudad una eficaz manera de ganar votos en las elecciones. Ha sido una explosiva relación entre los Lendoiros, Giles, Ruiz Mateos, Sorianos, Llorentes y Al Thani con los Gallardones, Aguirres, Camps y Barberás de los gobiernos municipales y autonómicos con los que se relacionan.Como ningún Gobierno español ha intentado poner coto a este desvarío futbolístico empresarial, como tampoco lo han puesto para evitar burbujas económicas como la del ladrillo, la de las cajas de ahorro o la de las famosas puntocom, va a tener que ser una entidad superior y algo más alejada de los intereses locales, la UE, la que ponga en su sitio a estos malabaristas del dinero ajeno. Como ya ha hecho la UEFA con el Málaga, al sancionarle con un año sin jugar competición europea por su enorme deuda con otros clubes, jugadores, empelados y Hacienda. Pero como siempre pasa, los protagonistas directos de estos desahucios deportivos esconderán sus responsabilidades en argucias legales y serán los equipos y sus aficionados los que sufrirán las sanciones, que llevarán a más de un club a la desaparición. Hasta el polémico presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, lo ha reconocido en una reciente entrevista en El País, en la que aseguraba que se teme que algún club español desaparecerá, porque son los más endeudados de Europa.
Fuente: lasprovincias.es
El ejecutivo europeo ya ha dado algunos pasos para descubrir las ayudas ilegales que están recibiendo los clubes españoles. Fue en abril del año pasado cuando dio a conocer la apertura de un expediente al fútbol hispano debido al plan que firmaron la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y el Consejo Superior de Deportes (CSD) para que los clubes profesionales afrontaran el pago de los 720 millones de euros que debían a Hacienda, mediante un pago fraccionado que se prolongará hasta el 2020. Y si bien es verdad que en el año transcurrido los clubes han abonado más de cien millones de esta deuda, la UE estudia si esta medida les reporta una ventaja competitiva frente al resto de equipos europeos. Bruselas está comprobando que las condiciones ofrecidas a los morosos no suponen una ayuda encubierta, bien porque los plazos de amortización sean demasiado largos o porque los intereses del recargo sean demasiado bajos. En este caso es necesario recordar que la familia Ruiz Mateos no pagó a Hacienda ni un solo euro de sus obligaciones tributarias cuando dirigía el Rayo.
Todo este asunto nació de una denuncia que el Bayern de Munich hizo a la UEpor boca de su presidente, UliHoeness, en la que advertía de los costosos fichajes que llevan a cabo los clubes españoles que, sin embargo, no cumplen con sus obligaciones tributarias. El dirigente germano fue muy claro al afirmar: "Pagamos cientos de millones de euros a España para que salgan de la mierda y luego sus clubes se eximen de pagar sus deudas". Después, el diario sensacionalista Bild publicó: "¿Acabarán pagando los contribuyente alemanes el fichaje de Ronaldo?". Ante este panorama, el comisario de Competencia, el español Joaquín Almunia, solicitó información al Gobierno sobre el acuerdo con los clubes. Y aunque todavía no se han pronunciado, la apertura formal del expediente y algunas informaciones procedentes de Bruselas inducen a pensar que no se augura una sentencia favorable a los intereses españoles. Si el ejecutivo hispano no demuestra que su tolerancia con las deudas no se traduce en una ventaja injustificada frente al resto de clubes europeos, la Comisión Europea dictaminará que se trata de una ayuda pública ilegal y obligará a los clubes a saldar las deudas con rapidez, bajo condiciones de mercado que no impliquen ningún trato de favor. Incluso si el Gobierno no cobrara dicha deuda, la CE podría presentar denuncia contra España ante el Tribunal de Justicia de la UE
Fuente: newcaster.ikuna.com
Pero no solo se investiga el acuerdo de las deudas con Hacienda. Las autoridades europeas también están estudiando el hecho de que Valencia, Hércules y Elche estén actualmente en manos de la GeneralitatValenciana, tras abonar los avales a la nacionalizadaBankia (pincha en este artículo en el que escribí sobre el caso), y que se estén manteniendo su actividad con dinero público, dándose la circunstancia de que es uno de los ejecutivos autonómicos más endeudados del país. Pero prácticamente todos los gobiernos regionales con clubes de fútbol profesionales en Primera o Segunda División y los respectivos ayuntamientos han ayudado de una manera más o menos clara a sus equipos, ya sea con recalificaciones de terreno (Real Madrid y Atlético de Madrid), abono de elevadísimos derechos de imagen mediante televisiones autonómicas (Barcelona) o subvenciones directas o disimuladas en superfluos convenios (prácticamente todos los demás). Y esto se tiene que acabar, pues si las administraciones no tienen dinero para ayudar a los más necesitados y recortan sin rubor servicios básicos en sanidad, educación o servicios sociales, no puede haber ni un solo euro que se destine a ayudar a un club de fútbol privado, normalmente en manos de manirrotos dirigentes. El último ejemplo es el del presidente del Deportivo, César Augusto Lendoiro, quien aseguraba que el club tenía un patrimonio neto positivo de 92 millones de euros, y ahora los administradores judiciales lo han situado en un déficit de 65 millones.Todos esto lleva a pensar que estamos en un país de golfos, que dejamos la responsabilidad de gobernar en manos de desalmados que solo se meten en política o en fútbol para llenarse las alforjas ellos o sus familias. Porque cada vez son más los casos de corrupción política y económica que se conocen, como Bárcenas, Urdangarín, Matas, Pepe Blanco, Baltar, Camps, Oriol Pujol, Palau, Fabra y los eres de Andalucía, y más los clubes llevados a la ruina por nefandos gestores, como Deportivo, Rayo, Málaga, Valencia, Atlético, Hércules, Elche, entre otros. Y como somos incapaces de poner orden en este berenjenal, tienen que venir de fuera para meternos en vereda, sacarnos los colores y recordarnos que no vale todo por el bien de unos colores o unas banderas.