La Unión Europea (UE) y Cuba convinieron este miércoles "estructurar el diálogo" sobre los derechos humanos, indicaron en conferencia de prensa el canciller cubano, Bruno Rodríguez, y la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
"Acordamos establecer un diálogo estructurado sobre los derechos humanos", dijo Mogherini luego de una reunión de casi dos horas con el canciller cubano en Bruselas.
"Siento que hemos alcanzado progresos. Hemos avanzado (...) y los anuncios confirman los progresos", dijo Rodríguez.
La UE y Cuba iniciaron las negociaciones de un Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación en el 2014. En esta negociación, que cuenta con un capítulo dedicado a los derechos humanos y derechos fundamentales, Bruselas busca incluir una "cláusula democrática".
"La UE y Cuba hemos tenido intensos intercambios en materia de derechos humanos desde hace muchos años", dijo el canciller cubano que subrayó no obstante que a pesar de tener "amplias áreas de avenencia" con la UE, "existen áreas de profundas discrepancias".
El capítulo sobre derechos humanos fue abordado en la última ronda de negociaciones que se celebró a principios de marzo en La Habana, con la parte europea consciente de que "son temas sensibles" para los cubanos.
Para pilotar del lado europeo este "diálogo estructurado", cuya primera reunión será en junio en Bruselas, la jefa de la diplomacia designó a Stavros Lambrinidis, el representante especial de la UE para los derechos humanos.
Mogherini aspira a acelerar las negociaciones con miras a sellar un acuerdo a fin de año, en especial luego del histórico giro en las relaciones de la isla con Estados Unidos que lanzaron a mediados de diciembre un proceso de deshielo.
Para ello la UE busca aislar y tratar por separado los aspectos del acuerdo más "sensibles" para Cuba y así avanzar en los aspectos comerciales y de cooperación.
La visita de Bruno Rodríguez a Bruselas se lleva a cabo casi un mes después del viaje a La Habana de Mogherini, el primero de un jefe de la diplomacia europea a la isla.
El viaje de Mogherini "marcó el inicio de una nueva etapa en los vínculos bilaterales", sostuvo Rodríguez.
Para normalizar sus relaciones, Cuba desea que la UE abandone su "Posición Común", que desde 1996 condiciona su cooperación a avances democráticos.
"Esperamos que cuando estemos más cerca de un acuerdo ésta (la Posición Común) pueda superarse", dijo Mogherini.