Tal vez sea por ese aparente callejón sin salida que Lene Hau, física danesa con un curriculum más extenso que el río Amazonas se hizo la pregunta de manera diferente y un poco a la inversa. “¿Es posible reducir la velocidad de la luz o incluso detenerla?” En realidad no se si se lo pregunto de esa forma, pero de alguna manera le llego la curiosidad. El solo hecho que a alguien se le ocurriera el concepto de detener la luz en su viaje me parece increíble, original y novedoso.
Lo consigue superenfriado una pequeña nube de rubidio hasta casi el 0 absoluto (-273,15º C) por la que se hace pasar un as (láser) de luz. El mecanismo fue básicamente este, pero claro no tan sencillo como suena. El reducir o detener la velocidad de la luz tendría en un futuro aplicaciones prácticas en las nuevas generaciones de supercomputadoras.
Es increíble lo que el ingenio humano, imaginación e inventiva pueden hacer.Rubidio: es un elemento químico cuyo número atómico 37, su masa atómica 85,47 y su símbolo en la tabla periódica es Ru ; es un metal alcalino, de color blanco plateado, blando, muy oxidable y reactivo, en la naturaleza se encuentra en las aguas minerales, en varios minerales asociados generalmente con otros metales alcalinos, y también en el café, en el te, en el tabaco y en otras plantas, pero en cantidades minúsculas. Y es muy utilizado en catalizadores y en células fotoeléctricas.