La vida es terror, miedo y belleza.

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Hay una gran  película que siempre que la dan me detengo a mirarla un buen rato ya que nos habla de la vida de una persona que nunca tomo participación de sus actos ya que no tiene miedo, terror y solo ve belleza en cada minuto.  

La vida es como la cocina, tú haces lo que quieres con ella
para alimentar el espíritu y la materia  

Forrest Gump expresa en los primeros minutos, que la vida es una caja de bombones, no sabes cuál te va a tocar. Es muy cierto hasta que la experiencia te enseña cual debes elegir y cuales no te gustan. El terror de  que te toque cosas que no te gustan, miedos de que te afecten tu salud y belleza por sus formas  de presentación. Rescatamos eso de la vida, el terror como película que nos asusta, nos sorprende en momentos que hacemos cosas que no son muy correctas, sobresalta la mente. El miedo a la incertidumbre, a la soledad, al mal momento de que puede suceder y a pensar que todo lo que hagas puede ser usado en tu contra. También la belleza de nuestros logros, hijos, matrimonio, relación con el entorno y principalmente el formato que elegimos realmente para nuestra existencia y valoramos. En el camino de la vida nos enfrentamos al continuo conocimiento si es que queremos aprender nuevos conceptos a diario. En ocasiones los golpes de la vida, ese terror que  aprendemos no es placentero. El miedo nos frena y la belleza nos expande. Ayer me decían algo que suena hermoso, crecí espiritualmente. ¿Qué es espíritu y qué es materia? Mi profesora de Filosofía me preguntaba en un examen. Hoy respondo que el formato de cómo encaramos la vida es el espíritu que transmitimos a la sociedad, la materia es lo que reciben y procesan de nuestros actos tangibles. El espíritu es lento y la materia inmediata. Ser coherente es espíritu, la forma es lenta y el proceso es superar las barreras que nos ponemos y nos imponen. Los sentimientos y las emociones que nos entran pasarlas por el tamiz de la experiencia. Algo difícil es ignorarlas y aprender a enfrentar lo toxico de lo no toxico. El terror es cuando entra lo toxico y contamina nuestro espíritu y materia Es sufrir lo toxico dentro de nuestro espíritu y como los cuentos de Stefen King están disfrazados de lindos personajes que dejamos entrar para sembrar el miedo, asustarnos e inmovilizarnos Si no los eliminamos nos siguen mucho tiempo, nos lastiman, nos dejan heridas en cada contacto. ¿Cómo eliminar el terror?,  al igual que en el libro o película se elimina con la belleza, la pureza de algo, con lo que nos apasiona, con el amor que transmitimos y valorar más las  cosas pequeñas que hay en nuestra vida. La belleza se adquiere e intento lentamente de aprenderla, desaprendiendo esas cosas que me dan el mal humor, el remordimiento y pedir perdón sincero, honesto a aquellas personas que lastimo en mi terror. La experiencias del pasado y recordarlos en cada momento más que el presente hace que el miedo se transforme en un cuchillo que no sabemos que uso le daremos. Mostrar la verdad, los errores y saber escuchar sin interpretar. Muy importante no interpretar cosas de la vida de otros como si fuera la nuestra. Nos hacen fuertes y humanos el terror, los miedos y poder superarlos con la belleza de nuestros pensamientos, Dedica algunos minutos a mejorar tu vida, en frente a ti hay mucho conocimiento busca lo que necesitas, encuentra lo que te falta, vuelve al lugar que dejaste por el miedo, sal de la oscuridad y ve luz que aprendes con tu ser interior enfocado a la búsqueda de tu belleza. Son meras palabras de mi pensamiento en una noche de verano, encontrando mi espíritu y resolviendo el terror de mi vida. La belleza son las fotos que ponemos para recordar un instante de la realidad. La realidad es muchas veces una mentira como esa foto que te sacas con un famoso. Tú sabes tu verdad. Jacobo Malowany