Sé que no soy nada original en esto de que me gusten las novelas en las que los libros y la lectura juegan un papel importante llegando a convertirse en muchos casos en un personaje más, así que no es de extrañar que este título me llamara la atención desde el primer momento y que me hiciera realmente feliz su llegada por sorpresa a mis manos. Hoy os hablo de La vida escondida entre los libros.
Mi opinión
Loveday no ha tenido una vida fácil, su infancia no fue precisamente feliz, criada en hogares de acogida desde muy pequeña. Pero ahora, en plena juventud, parece disfrutar de una felicidad tranquila trabajando en una librería y disfrutando de su soledad rodeada de libros, sus mejores y casi únicos compañeros desde que su infancia se truncó. Con una narración que intercala en la cronología lineal numerosos saltos a la vida pasada de la protagonista, La vida escondida entre los libros es una lectura que cautiva desde la primera página donde ya podemos imaginar que tras la fachada fría de Loveday se esconde un corazón destrozado y un alma atormentada que solo en los libros ha encontrado refugio. Sin necesidad de irnos a extremos dramáticos es fácil para el lector identificar ese amor por la literatura y el indudable poder sanador que tienen los libros, aunque solo sea desde el momento en el que consiguen evadirnos del día a día y ocupar nuestra mente en otras vidas y otros mundos. Libros que, aun así, y como muy pronto aprenderá nuestra protagonista, no pueden sustituir a la vida, ni pueden borrar un pasado con el que debe aprender a vivir.
Stephanie Butland derrocha sensibilidad y talento narrativo usando la figura del narrador protagonista para los tres momentos en los que se desarrolla la novela: el presente, el pasado y el pasado más reciente de Loveday, dando al lector una idea global y completa de lo que ha sido su vida. De su mano nos adentraremos en el dolor y el sarcasmo de la protagonista y con ella mantendremos firmes los muros que ha levantado a su alrededor, dando cabida solo a los libros porque ellos no pueden dañarla. Conoceremos también a todos aquellos que forman parte de su día a día, aunque ella prefiera mantenerlos lejos, como son Archie, propietario de la librería en la que trabaja, y Nathan, que llegará hasta ella gracias a un libro perdido en la calle. Ellos sabrán ver más allá de la coraza con la que Loveday se ha vestido y con ellos, rodeados siempre de poesía y libros, avanzaremos en una novela que nos deparará tanto momentos emotivos como muy divertidos.
La vida escondida entre los libros tiene también grandes dosis de intriga porque hasta bien avanzada la novela no sabremos qué sucedió exactamente en la infancia de Loveday para que sea la adulta que es hoy. Es una novela que, además, trata con suma delicadeza temas muy actuales como la violencia de género sin caer nunca en lo escabroso. Pero sin duda el tema principal de este libro es la necesidad de aprender a aceptar nuestro pasado y vivir con nuestras heridaspara poder avanzar en la vida porque muchas cosas pueden ayudarnos a mitigar el dolor, los libros pueden ser un buen antídoto para ello, pero de nada sirve esconderse entre ellos, la vida hay que vivirla y, desde luego, enriquecerla con buenas lecturas como ésta.
En definitiva, La vida escondida entre los libros es una lectura deliciosa, llena de ternura y sensibilidad, sentido del humor e ironía. Una novela plagada de referencias literarias, con una historia dura y emotiva y unos personajes maravillosos. Todos estos ingredientes hacen de ésta una lectura dura pero llena de magia que no dudo en recomendaros.