«La vida secreta de los fantasmas», texto de María Leach e ilustraciones de Berta Llonch

Por Guillermo Guillermo Lorén González @GuillermoLorn

«¿Qué sucede después de la muerte? ¿Nos convertimos en espíritus? ¿Cómo es el más allá? El ser humano lleva haciéndose estas preguntas desde la Antigüedad y las respuestas siempre le han llevado por el mismo camino: aunque inexplicable, hay algo. Y ese algo tiene mucho que ver con los fantasmas.»


Objeto incansable de la investigación científica y paranormal, entretenimiento de curiosos, origen de célebres tradiciones… Los fantasmas son el reflejo de nuestras creencias, valores y miedos, y la historia del mundo, después de leer este libro, ya no se puede explicar sin ellos.
María Leach, periodista, escritora y poeta, nos adentra en el universo mágico e inquietante de los fantasmas, acompañada por las ilustraciones de Berta Llonch, en un libro que abre la nueva colección de Lunwerg Criaturas extraordinarias.

Basta con reunirse en la oscuridad de la noche y encender una linterna o una vela. Si además se desencadena una tormenta, lo tenemos todo para que la conversación derive hacia temas relacionados con fantasmas. Hablar sobre casos inexplicables y misteriosos hará que los rumores del viento parezcan susurros y transformarán las sombras en figuras espectrales.
Pero lo cierto es que tampoco se necesitan demasiadas excusas para disfrutar de una buena historia de terror paranormal. Además de las leyendas, mitos y relatos populares de la tradición oral, hoy tenemos a nuestro alcance infinidad de libros, películas, series y pódcasts al respecto.

Estamos tan familiarizados con los fantasmas que, creamos o no en ellos, ya forman parte del escenario colectivo y su naturaleza logra seducir e inquietar incluso a los más escépticos. El mundo ha ido cambiando y los fantasmas le han acompañado fielmente. Desde las primeras civilizaciones hasta la Edad Contemporánea, han sido el reflejo del pensamiento humano a la hora de intentar explicar qué ocurre después de la vida, a la vez que han servido de modelo para tratar otras grandes cuestiones como el amor, la familia, los conflictos, las traiciones… Los fantasmas rebosan información. Encarnan la evolución de nuestro sistema de valores destapando miedos ocultos y las dudas más profundas. ¿Seguirá nuestra alma existiendo tras fallecer? Y, de ser así, ¿puede la experiencia terrenal determinar cómo nos recibirá el más allá? Si recurrimos a la física cuántica, el componente básico del universo no es la materia, sino la energía, que ni se crea ni se destruye y se propaga mediante ondas electromagnéticas en continuo movimiento.

Aplicando estos principios, estamos hechos de cuerpo, mente y energía. Una energía —o conciencia no local— que constituye nuestra auténtica identidad y que, además de estar íntimamente ligada al universo, actúa siempre en positivo y es eterna. Bajo la visión cuántica, la muerte es solo un tránsito, porque la existencia continúa en una realidad diferente. Sea lo que sea aquello que nos espera al otro lado, está claro que los fantasmas nos instan a formular preguntas, buscar respuestas y nos unen en el deseo de creer que hay algo más. En definitiva, abren una puerta —chirriante y desconocida— para que conectemos con la esencia de la vida.

¿Qué es un fantasma? La cuestión de qué son los fantasmas ha sido ampliamente estudiada y debatida a lo largo de la historia de la humanidad. La idea más tradicional, así como la más extendida, es que se trata de los espíritus de personas difuntas. De algún modo, su alma ha trascendido al cuerpo físico y sigue presente en nuestro mundo. Al hilo de esta creencia, se podría decir que hay una dimensión paralela en la que es posible existir de forma etérea y es ahí donde habitan los fantasmas, aunque nuestro sistema sensitivo y sensorial no pueda percibirlos.
Y al igual que cruzamos una puerta para entrar o salir de cualquier lugar, los portales o vórtices permiten a estos seres introducirse en nuestra dimensión humana. A través de estos campos de energía concentrada, que sin duda recuerdan a esa «luz al final del túnel» que describen quienes han tenido experiencias cercanas a la muerte, los fantasmas se transportan de un lado a otro con total libertad. Algunos de los portales que los investigadores paranormales han podido capturar en fotografías se asemejan a un rayo en miniatura o a una pequeña grieta brillante.
Pese a no ser visibles, las personas con alta sensibilidad pueden notar sus efectos. Los escalofríos, el hormigueo o la desorientación, similar a la de un mareo, son signos que podrían estar indicando que andamos cerca de uno. Por lo general, los portales solo se abren un instante, lo que dura un parpadeo, tiempo suficiente para que los escurridizos fantasmas aprovechen para colarse por ellos. Estos orificios de entrada y salida entre el mundo físico y el espiritual suelen hallarse sobre todo en cementerios, grandes depósitos de agua —como estanques o lagos— y fuentes de energía como las líneas eléctricas, pero también en espejos, puertas, escaleras y ventanas. No en vano, muchos aseguran que cada hogar cuenta con, al menos, un vórtice.
Puede haber diversos motivos por los que algunos espíritus permanecen vinculados al reino de los vivos sin lograr encontrar el descanso eterno. En ocasiones, es porque se han extraviado en su camino hacia el otro lado, pero también puede ser que una tragedia u objetivo no consumado les obligue a permanecer en este limbo entre la vida y la muerte, entre el pasado y el presente. Sea cual sea la razón que les retiene en la tierra, resulta lógico que los fantasmas necesiten hacerse notar e interactuar con nosotros, ya sea para que les ayudemos en su transición, para zanjar esos asuntos pendientes o bien porque no tienen nada mejor que hacer, ¿quién se pasa 100 años encerrado en un castillo de brazos cruzados? Por eso, se centran en que seamos conscientes de su presencia. Cuanto más inquietante e incomprensible sea su acción, más les tendremos en cuenta. Visiones de halos de luz, extraños sonidos de ultratumba, objetos que se mueven de sitio… incluso hay espíritus que no son capaces de comunicarse en absoluto y, aun así, nos hacen sentir su cercanía.

Pero no solo de fantasmas vive el mundo paranormal y en este libro, las autoras nos van a habar de los Espectros que es el más común de todos los fantasmas, o quizá el más reconocible como tal por la forma que adopta; del Ectoplasma o ectoniebla que es una poderosa manifestación de energía fantasmal. Puesto que no tiene aspecto humano, es más complicado de identificar y se podría describir como una masa gaseosa de color gris, negro o verde, que flota a unos metros del suelo, puede cambiar de forma y se desplaza con gran rapidez, incluso en dirección contraria al viento. Otro fenómeno paranormal es el de los orbes, uno de los más fotografiados y grabados en vídeo por los buscadores de fantasmas. Otro de los fenómenos paranormales que vamos a leer en el libro es el de los Objetos que cobran vida, lo que los expertos llaman poltergeist.

Objeto incansable de la investigación científica y paranormal, entretenimiento de curiosos, origen de célebres tradiciones… Los fantasmas son el reflejo de nuestras creencias, valores y miedos, y la historia del mundo, después de leer este libro, ya no se puede explicar sin ellos.

Lee y disfruta de las primeras páginas del libro.

La autora del texto:
María Leach (Barcelona, 1979) es periodista y escritora. Licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universitat Pompeu Fabra, se estrena como autora en 2017 con No te acabes nunca (ESPASAesPOESÍA), un palpitante poemario sobre el duelo. Poco después participa en el álbum colectivo Versos de buenas noches (Destino), junto a una decena de los poetas más representativos del boom poético español. También ha publicado dos cuentos infantiles: ¿Qué bigotes me pasa?/Què bigotis em passa? y Siempre contigo/Sempre amb tu (Baobab/Estrella Polar), ilustrados por Olga de Dios y Katia Klein respectivamente.

María Leach Berta Llonch

La ilustradora:
Berta Llonch (Cádiz, 1983) es una artista gaditana, aunque vive y trabaja en Madrid. Allí estudió la carrera de Bellas Artes y actualmente trabaja en su estudio, donde compagina el desarrollo de su obra personal con encargos para particulares y empresas. Desde hace unos años, descubrió en la acuarela todo lo que necesitaba en una técnica. Ha publicado varios libros, como Mopi o Desde la crisálida, y ha expuesto en varias galerías y museos nacionales e internacionales.

El libro:
La vida secreta de los fantasmas ha sido publicado por Lunwerg Editores en su Colección Criaturas extraordinarias. Encuadernado en tapa dura, tiene 128 páginas.

Como complemento pongo el tema central de la película Ghost: Righteous Brothers | Unchained Melody [From the Movie Ghost].


Para saber más:
https://marialeach.com/
https://bertallonch.com/